Yo soy el primero que reconozco que voto con un contenido sentimental, y así prácticamente todo el mundo que conozco. Salvo en 1996 que hubo un hartazgo importante en cuanto al nivel de corrupción que se alcanzó, y que hubo, antes que nada, una gran abstención socialista, y un ligero trasvase de voto, a izquierda y derecha del PSOE, que llevó a ganar al PP, las elecciones en España son mas ir a votar por sentimiento y contra el "enemigo" visceral, cada uno que identifique como tal al suyo, que a un proyecto y a un programa.
Ni una guerra civil, ni cuarenta años de dictadura, ni treinta de democracia "imperfecta" en algunos aspectos, han hecho que en el fondo sigan habiendo dos concepciones antagónicas de ver el mismo país.
Y así nos va, dilapidando recursos y esfuerzos durante siglos, desde que este país se llama España. Un personaje histórico que admiro, y al que en España sólo se le acerca Adolfo Suarez, es el General DeGaulle. Una persona que superó ideologías para, en un momento crucial de la historia de su país, supeditar el bienestar del mismo al resto de condicionantes políticos de su tiempo. Era un político que despreciaba el politiqueo. El día que en este país tengamos a alguien que tenga esa visión, obviamente adaptada a nuestro tiempo y necesidades, nos empezará a ir de otra manera.
Un saludo.