La economía catalana se ahoga: 17 impuestos y 200 empresas públicas más que Madrid
Impuestos sobre centros comerciales, impuestos a los residuos, impuestos a las casas vacías, impuestos a las bebidas azucaradas… Aunque a la
Generalitat de Cataluña no le quedan muchos aspectos por gravar, en 2022 aprobará su impuesto propio numero 17. Un sablazo a los catalanes necesario para mantener las más de 330 empresas públicas que hay en la región. Esto supone unos 200 entes públicos más que los existentes en la
Comunidad de Madrid, que en 2021 ha reducido a cero los tributos de la región.
En el caso de Cataluña, los impuestos propios ascienden a 19 -aunque cuatro han sido declarados inconstitucionales-, siendo la autonomía más creativa a la hora de multiplicar los tributos a sus ciudadanos: canon del agua, sobre la incineración y deposición de residuos, sobre las estancias en establecimientos turísticos, sobre las viviendas vacías, sobre la emisión de partículas a la atmósfera o sobre bebidas azucaradas envasadas son algunos de ellos. El pasado 15 de septiembre, entró en vigor en Cataluña su tributo propio número 16, sobre las emisiones de gases contaminantes por parte de la comunidad.
Una carga impositiva necesaria para financiar las más de 330 empresas públicas que existen en Cataluña. La autonomía cuenta con 52 entes públicos, más de 120 consorcios para administrar servicios y ejecutar políticas públicas, 63 sociedades mercantiles y cerca de 100 fundaciones. Una multiplicidad de organismos que replican a un «miniestado» y que los políticos catalanes deben financiar friendo a impuestos a los ciudadanos.
En el lado contrario se encuentra la Comunidad de Madrid que en comparación con Cataluña cuenta con 200 entidades públicas menos -52 entes públicos, 29 consorcios, 35 sociedades mercantiles y 61 fundaciones- lo que ha permitido a la presidenta de la Comunidad eliminar todos los tributos propios que había en la región. De esta forma, y según el Panorama de la Fiscalidad Autonómica y Foral 2021 del Registro de Economistas Asesores Fiscales del Consejo General de Economistas, los ingresos en Cataluña por tributos autonómicos por habitante son de 85,1 euros, mientras que en la Comunidad de Madrid es de cero euros.
Y pide más dinero al Estado
La Generalitat de Cataluña prevé pedir prestados al Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) 12.662 millones de euros en 2022, una cantidad ligeramente inferior a los 13.014 millones solicitados en 2021. Un total de 11.138 millones de euros de esa cantidad servirán para afrontar amortizaciones de deuda, principalmente para cubrir el pago de préstamos de años anteriores del FLA y otros mecanismos de liquidez habilitados por el Estado.
El Estado puso en marcha estos instrumentos a finales de 2012, en plena crisis financiera, para ayudar a las comunidades a disponer de liquidez en un momento en que los mercados financieros estaban cerrados a las emisiones de deuda de las autonomías. De entrada, esos préstamos se dieron a diez años, con los dos primeros de carencia, aunque desde enero de 2020 se otorgan a doce años, con cuatro de carencia. Según datos de Hacienda, al cierre de 2021 Cataluña habrá recibido 13.552,8 millones de euros a cargo del FLA, lo que supone el 43,49 % del total de fondos repartidos entre las comunidades adheridas a dicho mecanismo.
Todas las rebajas de impuestos en Madrid elevan la recaudación
Sin duda una de las máximas que ha perseguido Ayuso ha sido consolidar la política de baja presión fiscal del Partido Popular, que ha permitido un ahorro a los madrileños de más de 53.000 millones en los últimos 17 años. Desde el Ejecutivo de Ayuso niegan que las rebajas de tributos supongan una merma en los ingresos ya que en las realizadas hasta la fecha por los distintos gobiernos del PP en la región, ha aumentado la recaudación.
En 2007, bajo en mandato de Esperanza Aguirre, la Comunidad de Madrid aprobó una rebaja del IRPF de un punto repartido en los cuatro tramos de tarifa. Pese a lo que quieran decir las malas lenguas, ese año la recaudación aumento 358 millones en comparación con el año anterior. Algo similar a lo que ocurrió con las reducciones de este impuesto en 2014, 2015 y 2018 cuando el Ejecutivo regional aumento su recaudación en 126, 573 y 946 millones de euros respectivamente.
Ayuso aprobó, el pasado mes de noviembre, la mayor rebaja del IRPF llevada a cabo hasta ahora en la región, que reducirá 0,5 puntos en cada uno de los tramos autonómicos. A esta medida se suma la supresión de todos los impuestos propios, lo que convierte a Madrid en la única autonomía sin este tipo de tributos y que ha entrado en vigor el 1 de enero de 2022.