En Madrid sí se paga. A partir de 3M, gracias al "Impuesto de Solidaridad de las Grandes Fortunas" temporal-pero-que-pasa-a-ser-permanente, que se inventaron precisamente para oponerse a la exención del IP que había en Madrid. Pregonaban las bondades de las transferencias de impuestos a las Comunidades Autónomas con el argumento de la "corresponsabilidad fiscal", de forma que cada Comunidad ajustase su carga impositiva y diese la cara ante sus contribuyentes, que verían así cuánto les cobraba. Pero luego, los mismos que claman contra la recentralización (que sostienen que es muy de derechas) se apresuraron a recentralizar el IP.