Hola Mohican,Brainchip sigue siendo la mayor posición en el fondo y este hecho requiere una explicación más amplia. Como los foreros sabéis la composición de la cartera responde en primer lugar a identificar los temas más relevantes que mueven la sociedad y la economía. El movimiento proviene tanto del lado de la oferta – es decir los desarrollos tecnológicos - , como por el lado de las aplicaciones y normalmente los dos factores oferta y demanda se entrelazan. Los grandes gestores venden sus fondos de inversión como fondos temáticos, es decir, se centran en el lado de la demanda. Obviamente es mucho más fácil vender un fondo temático con nombres que resuenan como “smart robotics”, “smart water”, “coche eléctrico”, etc. porque todo el mundo entiende esta idea. Nuestra idea es otra y aunque naturalmente miramos detenidamente el lado de las aplicaciones, nos interesan especialmente aquellas empresas que precisamente desarrollan las tecnologías clave para que las aplicaciones puedan realizarse. Este enfoque tiene una gran ventaja ya que el desarrollo de tecnologías clave es cada vez más complejo y por ello las empresas en este sector gozan de una alta barrera de entrada – que a su vez se traslada en márgenes operativos muy altos. Para la selección de las empresas contemplamos toda la cadena de valor para centrarnos en aquellas empresas que reúnan nuestros requisitos en cuanto a potencial de ventas, rentabilidad y valoración. A modo de ejemplo, ya hace cuatro años identificamos el despliegue del 5G como una aplicación clave que a su vez actúa también como tecnología clave. En toda la cadena de valor del 5G nos hemos centrado en empresas donde observamos márgenes más altos y con mejores perspectivas de futuro y menos en empresas que se benefician del despliegue. Entre estas empresas se encuentran por ejemplo las empresas del diseño de los chips Synopsys y Cadence y las empresas alrededor del testeo de la red 5G, los elementos y los chips como por ejemplo Keysight. ¿Si es así porqué tenemos una cuota tan alta en Brainchip y no en Synopsys o Keysight? Cualquier inversor que de lo más remoto se interese por la evolución de las nuevas tecnologías así como las tecnologías emergentes se da cuenta que hay un tema que une todas estas tendencias y que constituye un cuello de botella: El consumo de energía! La explosión de datos y de dispositivos conectados unidos a la inteligencia artificial (AI) requiere un incremento de la velocidad de la transmisión de datos y un aumento de la capacidad de datos. Hasta ahora hemos sido capaces de satisfacer estas demandas con un refinamiento de las tecnologías clave, utilizando nuevos materiales como el nitruro de Galio (GaN) y la miniaturización de los elementos. Ahora bien, mientras se aplicaba la conocida ley Moore durante muchas décadas con éxito, es ahora cuando de verdad finalmente entramos en un dilema porque entramos en un límite natural de la miniaturización de los elementos. Está claro que al hacer los elementos cada vez más pequeños en algún momento alcanzamos el nivel de un átomo. Y es entonces cuando ya no podemos hacer cálculos sobre el comportamiento del elemento porque los átomos están sujetos a las leyes de la física mecánica, es decir un comportamiento aleatorio. ¿Cuál es la solución? Por un lado se traslada el cálculo inherente de la IA al dispositivo final (así llamado edge computing), por el otro lado se está investigando un chip con una tecnología enteramente nueva: El chip neuromórfico cuyo funcionamiento se inspira en el cerebro humano. Este chip permite hacer los cálculos necesarios para la IA en el mismo dispositivo y por ello necesita menos energía que los chips clásicos. Pero su auténtica potencia proviene del hecho que permite un aprendizaje autónomo en el mismo chip sin la necesidad de enviar los datos para realizar los cálculos de la a la nube. Actualmente aparte de Brainchip solo Intel y IBM están desarrollando este tipo de chips (y algún que otro start-up). Brainchip declara que tienen una ventaja tecnológica de alrededor de tres años en cuanto al desarrollo del chip en comparación con IBM y Intel. Como competidor en potencial hay que ver también el chip Coral de Google. Por algún motivo Google no hizo mucha publicidad al lanzamiento de su chip hace año y medio, pero este chip supera con creces otros chips parecidos. De hecho, en una presentación de Brainchip este chip aparece también como alternativa junto con los de Intel y IBM. Los chips de Intel y IBM tienen algunas desventajas con respecto al chip Akida de Brainchip (detalles se encuentran en las presentaciones de Brainchip y en el foro sobre Brainchip en Australia “hotcopper” donde hay una discusión activa sobre cualquier detalle de Brainchip). ¿Cuáles son los riesgos? Del lado tecnológico parece que el chip encuentra una buena acogida y la NASA por ejemplo parece contenta. Un riesgo puede ser que las empresas que utilizan chips para el IA se contenten con la capacidad del Coral de Google y no requieren una mayor capacidad. No obstante, los analistas prevén un crecimiento enorme del mercado para los chips neuromórficos y todo parece indicar que realmente necesitamos un chips que tiene la capacidad de auto aprendizaje (algo que el Coral no puede). Un riesgo para la acción puede ser que los inversores pierdan la paciencia con el estado de las ventas y contratos multimillonarios que justifiquen la valoración, pero hay que reconocer que la empresa ha satisfecho todos sus anuncios a rajatabla. En resumidas cuentas, creemos que Brainchip está muy bien posicionada y poseedor de una tecnología auténticamente revolucionaria. Me recuerda un poco a la empresa Universal Display en donde el fondo invirtió hace 10 años y que con el desarrollo masivo de sus OLEDs contribuyó bien a la rentabilidad del fondo. ¿Que otras tendencias claves observamos? Por los mismos motivos expuestos arriba las empresas tecnológicas buscan otras posibilidades para acelerar la transmisión de datos sobre todo entre los centros de datos y dentro del centro de datos. Quizá no tan revolucionario como el chip neuromórfico …, pero para alcanzar velocidades muy altas con alta capacidad se están desarrollando nuevas tecnologías para aprovechar la fibra óptica al máximo. Una de estas tendencias es el empleo cada vez más fuerte de los llamados PICs (photonic integrated chip) cuyo pionero ha sido la empresa Infinera. En todo caso ante el fondo de la explosión de datos observamos un mayor empuje del empleo del llamado “silicon photonics” y dentro de este proceso una micro tendencia hacía la óptica coempaquetada (co-packaging en inglés). La óptica coempaquetada es una tecnología en auge que aborda algunos de los retos creados por los transceivers ópticos enchufables de pequeño formato, como la gestión térmica, el consumo de energía y el ancho de banda. Este ejemplo es uno de las muchas tendencias que seguimos y cuya identificación permite beneficios sostenibles y altos. Opinamos que los sectores de la tecnología y de la técnica de la medicina son los dos sectores donde se encuentran las empresas con el más alto margen y volumen de ventas. Para el gestor “clásico” supone un reto porque esta clase de gestores se ha formado analizando coeficientes de las empresas e invirtiendo por el famoso “Value Investing”. No obstante, ante el fondo de un mundo cada vez más complejo este tipo de análisis es con creces insuficiente ya que se basa en cifras del pasado que al día de hoy tienen poca relevancia. Es imprescindible entrar profundamente en las tecnológicas y analizar el potencial de una empresa junto con el desarrollo de las nuevas aplicaciones. Por último informaros que hemos reducido la exposición a la renta variable del 68% a aproximadamente el 55% como medida de precaución ante un entorno menos favorable por una posible subida de la inflación.Un saludo,Jürgen