Es cierto que han empujado un experimento económico muy interesante en Argentina, en busca de una mejoría sustancial de la vida de los argentinos. Un experimento digno de antología independientemente de si ganan o no, pero eso no tiene nada que ver con la denominada "causa Malvinas". ¿Existe realmente esa causa?
El trato a los argentinos en tiempos de Malvinas
Actualmente la presidente Cristina Fernández de Kirchner habló de una "causa Malvinas" ante el Mercosur que se supone que debe unir a Latinoamérica, y Hugo Chávez ha expresado su apoyo también (Venezuela no dejará sola a la Argentina en caso de guerra por las Malvinas), algo que de alguna manera es una oda a la dictadura de Galtieri.
Galtieri fue un dictador que tuvo como gran mérito la persecución de adolescentes argentinos de izquierda, y la venta de los bebés que hubiesen procreado, un drama que fue retratado en la película argentina "La historia oficial" de Luis Puenzo donde un alumno rebelde cuestionaba a la profesora de historia diciendo "la historia oficial la escriben los asesinos". Durante el tiempo de la dictadura la censura era tal que incluso los cuentos infantiles eran censurados. Elsa Bornemann escribió un escrito llamado "los elefantes ocupan mucho espacio" que trataba sobre un elefante en un circo que quería liberarse de sus amos y fundar un circo de humanos para una audiencia animal
Elsa Bornemann recuerda el momento de la censura: "la evaluación que hago años después y, leyendo el decreto, es que la gente creyó que era por el primer cuento, que habla de la huelga. Yo lo escribí entre los años 72 y 75, cuando la huelga era un derecho de los trabajadores, e incluso la primera edición salió bajo gobierno democrático. Pero los quince cuentos tienen que ver con la justicia. Entonces, sabiendo todo lo que pasó, llego a la conclusión de que mi libro era intolerable para determinado grupo que estaba al mando en nuestro país: estaba prohibida la paz, la solidaridad; se instaló la fuerza de los contravalores o disvalores". - Un elefante ocupa mucho espacio
"Allí donde se comienza quemando libros, se termina quemando hombres" (Heinrich Heine). Además del secuestro y la desaparición sistemática de personas y de la consolidación de las bases del plan económico de Martínez de Hoz, la última dictadura militar también llevó adelante una clara política de desaparición y sustitución de buena parte de la producción literaria de la época. "Primero había una evaluación política del libro, y luego venía la censura, que era una herramienta de control político en manos del Estado. No había ninguna improvisación, ningún capricho. Sabían muy bien lo que hacían", cuenta el investigador Hernán Invernizzi. - Un elefante ocupa mucho espacio, la censura en la dictadura
En las escuelas le enseñan a los niños y jóvenes argentinos a amar a su patria y que las Malvinas son de ellos. Los chicos que escuchan esas historias de guerra están escuchando cosas de libro de texto, cosas que se cuentan, pero no estaban cuando eso ocurrió, y al igual que el Titanic, el cuento y la realidad son algo distintos. La historia oficial siempre tiene sus omisiones. Resulta curioso que con apenas 30 años de ocurrida la guerra, se mire el asunto con la misma vehemencia con que se apoya un partido de futbol, pero la cosa no fue como el gol de Maradona.
Las mujeres de dos desaparecidos reconocieron en el juicio por 44 víctimas, en Santiago del Estero, a un mismo represor que participó en los operativos clandestinos durante la el Terrorismo de Estado. María Rosa Ruiz de Alvarez, esposa de un comerciante santiagueño desaparecido en 1976, pidió hoy que los represores “vivan 50 años más para pagar todo lo que hicieron”, en el marco del juicio oral por 44 víctimas antes y durante la última dictadura militar. - “Quiero justicia, no que mueran, sino que vivan 50 años más para pagar todo lo que hicieron”
Siempre me impactó mucho lo que fue la última dictadura militar que vivió el país, me parece que a partir de ese momento se modificaron, definitivamente, un montón de cosas de la coyuntura de la sociedad y la política de la Argentina. A partir del golpe la deuda externa creció cuatro veces; se desapareció a un montón de gente; hubo un mundial medio arreglado y medio dudoso y estuvo la guerra de Malvinas que fue como la última frutilla del postre de los militares. Malvinas representa el final de la dictadura y la hijaputez más grande que es mandar a soldados sin experiencia a combatir contra una fuerza militar de las mejores del mundo. En la introducción había puesto una frase que luego no publicamos, de una periodista de Clarín, que decía que "esta fue la guerra en que los pibes no llegaron a llorar por sus novias sino que lloraban por sus madres". - Sobrevivir a Malvinas y morir en Cromagnon, dos tragedias atadas con alambre
En Argentina, cerca del 70% de los jóvenes discrimina a los extranjeros, principalmente judíos, chinos, negros o bolivianos (Video: Argentinos Xenofobicos). ¿Adonde está la unión latinoamericana? Es que los argentinos ni siquiera son unidos entre sí. Lo aparentan cuando se trata de pelear contra terceros, pero cuando eso pasa se vuelve a los mismos antivalores de antes.
Argentina fue colonizada por españoles, y los indígenas llevaron a cabo insurrecciones y guerras contra los españoles. Las enfermedades traídas de Europa diezmaron la demografía indígena. En 2012 son alrededor del 6% de la población de Argentina, y la mayoría de ellos ya perdió su tradición y sus costumbres, pues han sido transculturizados. Estos nativos son los verdaderos argentinos, y los demás serían inmigrantes, invasores. Si se habla de xenofobia en Argentina, ¿primero el argentino blanco promedio debería discriminarse a sí mismo por ser hijo de inmigrantes que trajeron enfermedades? Los jóvenes argentinos hablan de que los bolivianos huelen mal. ¿Y los que trajeron las enfermedades a los indígenas, cómo olían? Pareciera que el gobierno argentino ha invadido y sigue invadiendo a los indígenas argentinos.
Amnistía Internacional investigó la situación de los pueblos indígenas de Formosa. Denuncia que sufren una “sistemática violación” de los derechos humanos, despojo de tierras y una estructura estatal que reprime a las comunidades originarias. - “Una histórica discriminación”
Los indígenas muestran claros signos de exclusión social y económica en Argentina (Pobreza, educación y discriminación. Los aborígenes en Salta (Argentina)). Ahora bien, cuando hablamos de Malvinas, vemos que los argentinos que viven allí no son tratados con discriminación por los británicos que viven allí.
Se habla de que hace casi 200 años llegaron ingleses a echar a los argentinos que allí vivían. Los que allí vivían ya se murieron, los que los echaron ya se murieron. Pensar en vengar a gente que se murió hace 200 años es ridículo. Si Caín mató a Abel, ¿será necesario vengar a Abel? Sería tan inútil como tratar de vengar a los indios muertos en la conquista española. Es que los españoles de hoy no mataron a ningún indígena, y ya todos los que estuvieron allí están muertos. Los españoles de hoy no tendrían que sentirse culpables por la conquista. De igual forma, los isleños de Malvinas de hoy no echaron a nadie. ¿Cómo pretenden cobrarles lo que pasó hace 200 años?
El trato a los veteranos
Lo cierto es que la guerra no la perdieron los soldados argentinos, la perdieron los oficiales y los altos mandos militares de Argentina. Fue tan mal planificada que cada uno hizo lo que le pareció mejor, se hizo todo de prisa, sin planear las consecuencias ni la logística, ni nada. Los soldados no tenían municiones ni comida. ¿Qué iban a hacer los soldados argentinos? ¿Tirarle piedras a los británicos?
En el poblado de Goose Green en Malvinas, cuando las fuerzas argentinas invadieron, encerraron a cerca de 150 personas de ese pueblo en condiciones infrahumanas con apenas un inodoro para todos. No había nadie que hablara inglés, los habitantes civiles de este pueblito estaban completamente aterrorizados. En la actualidad las gentes de este pueblo detestan a los argentinos con todas sus fuerzas, y tienen razón para ello. Los soldados británicos también cuentan sus historias.
I saw close friends killed and mutilated, crying for their mothers as the life ebbed from them. I witnessed wounded and badly burned men writhing, screaming in agony. But I was a Para — a tough guy in one of the toughest units in the British Army — and all that death and destruction did not bother me. Or so I thought. - A very dirty war: British soldiers shot dead by enemy troops waving the white flag and Argentinian prisoners bayoneted in cold blood. An ex-Para tells of the horrors of the Falklands
Los mismos soldados argentinos que también sacrificaban sus vidas haciendo su deber, en una guerra que no era ni de ellos, ni tampoco de los soldados ingleses que venían a pelear contra ellos, tampoco recibieron un mejor trato.
Si ya es grosero para un soldado que se enlista voluntariamente, ir a una guerra. Lo es aún más para aquellos que por obligación (y no por deseo propio) van a pelear, los conscriptos que tuvieron que prestar Servicio Militar Obligatorio y que fueron seleccionados aleatoriamente en una rifa. El argentino conscripto Pablo de Benedetti no fue torturado por los británicos, sino por los suyos propios (Video: Veteranos de las Malvinas piden justicia). Los oficiales no daban comida a los soldados porque se la comían ellos, y los soldados tenían que salir a conseguirla en aquella tierra yerma, y los oficiales la retenían porque alegaban que debían usarse en ocasiones más urgentes. Esos oficiales no hicieron su trabajo de brindar siquiera provisiones para el combate. Muchos de los soldados ni siquiera tenían entrenamiento militar. Pablo de Benedetti fue amenazado por hablar, apenas uno de los más de 100 casos de abusos que involucran a más de 80 oficiales.
Recordemos que de los 649 muertos del lado argentino, 143 eran soldados conscriptos, enrolados a la fuerza. Comparar más de 100 casos de abusos con la muerte de los conscriptos hace ver que los oficiales argentinos eran casi tan nocivos para los soldados argentinos como lo eran los enemigos británicos. La diferencia es que los británicos eran el enemigo y se suponía que debían hacer lo que hacían.
Miguel Anderfuhrn fue soldado conscripto, y recuerda que los primeros 4 muetros en su regimiento murieron de hambre. Su oficial les abandonó sin decir nada. Mario Oshiro cuenta que cuando venían los ingleses, iban a escapar en un vehículo, pero el cabo les dejó. Y con el hambre que tenían no podían correr para alcanzarles. Jorge Tedesco era conscripto y los ingleses le rompieron la rodilla a punta de culatazos. Jorge Rey era conscripto y cuando llegaron los ingleses, por fin pudieron comer. Para el conscripto Norberto Jorge Flores la guerra fue una eterna búsqueda de comida. (Veteranos de la guerra de Malvinas).
Falso culpable. El capitán del Irízar envió a un conscripto a buscar el sable y el casco de un soldado inglés. No pudo regresar al barco por temas climáticos ajenos a él. Sin embargo un contraalmirante lo culpó, lo insultó, le dijo que debería fusilarlo, pero que lo mandaría al frente donde seguramente moriría. Una historia que refleja la improvisación con la que se condujo esta guerra. - Un conscripto en Malvinas, rehén del terror y el disparate
Cuando los veteranos de Argentina volvieron, no conseguían trabajo, eran vistos como locos peligrosos. Los mismos veteranos piden que no se enaltezca a Galtieri ni a su junta en los libros de historia (Video: Testimonio de un veterano de Malvinas a 30 años). Es que parece que los soldados argentinos, especialmente los conscriptos, son los nuevos indígenas argentinos. La propaganda habla de cómo Malvinas unió a los argentinos. ¿Los unió tanto? En realidad los unió más el famoso gol de Maradona. Mejor dedicaran más tiempo al futbol, que a los futbolistas no los tratan como a los veteranos.
La guerra es un juego de dinero, donde los pobres ponen los muertos, la clase media pone el dinero, y unos cuantos se hacen ricos. En la guerra no hay buenos ni malos, todos son malos, todos se quieren matar. La guerra es un negocio para embaucar a los tontos, donde personas que se conocen envían a personas que no se conocen, a matarse. Si lees mis posts La guerra: Apostando en la pelea de gallos y también El triste engaño del terrorismo comprenderás cómo funciona la guerra. Al promoverse la guerra en tiempos de la dictadura, los que ganan son los de siempre. Imagino que los argentinos no estarían interesados en ayudar a que los empresarios armamentistas ingleses se hagan de dinero con las muertes de soldados argentinos. Y adivinen adonde están los mayores fabricantes de armas. Recordemos bien que muchas de las armas que Argentina usó en el conflicto de 1982 eran británicas. Lejos de ser "usar sus armas en su contra", en realidad los argentinos debieron pagar dinero a los armamentistas, que disfrutaron el dinero mientras morían argentinos. Sí, la más grande derrota fue que los soldados argentinos muertos alimentaron las arcas de fabricantes de armas ingleses, tanto las que usaron los argentinos, como las que usaron los británicos.
Pero los más indignante para cualquier argentino fue que la guerra de Galtieri endeudó a Argentina, y esa deuda estructural que no se usó para combatir la pobreza, sino simplemente para pasar dineros de las arcas argentinas a otras arcas, terminó en la hiperinflación de 1989, donde la gente se moría de hambre en un país que produce carne y frutas. Es que la guerra no es gratis. Alguien paga la cuenta, igual que los griegos hoy pagan con sus empleos, rebajas salariales y pensiones, los gastos de sus políticos en armas compradas a Francia y Alemania.
Las Malvinas ¿son argentinas?
Hay varios argumentos que se usan para justificar que las Malvinas son argentinas.
Las Malvinas son tan argentinas, como Latinoamérica es territorio de España. Históricamente hablando Argentina parece tener tanto derecho histórico sobre las Malvinas como España tiene derecho histórico sobre el territorio argentino. Por casi 200 años los ingleses habitaron en las islas, y hace casi 200 años que Latinoamérica se independizó de España. Si alguna vez las Malvinas fueron argentinas fue por unos 13 años, y Reino Unido las ha tenido por casi 200 años. Se dice que las Malvinas son británicas. Pero resulta que ellos tienen su propio parlamento, su propio gobierno, y sólo dependen de Reino Unido para efectos de defensa, de la misma manera en que Japón depende de EUA para su defensa. Para todos los efectos son virtualmente un país casi independiente. Entonces ¿de quién son las islas?
No entiendo bien por qué Cristina Fernández tiene las mismas pretensiones de la dictadura militar. En épocas pasadas, la dictadura de Galtieri acudía al tema de Malvinas como un último recurso político, en virtud de la baja de popularidad que le trajo la cacería de adolescentes argentinos de izquierda. La guerra de Malvinas invisibilizó a las abuelas de la Plaza de Mayo. Cristina con su experimento económico tiene razones de sobra para no ocupar de Las Malvinas:
AFP, 19 de diciembre de 2010. Argentina, Brasil, Bolivia y Venezuela son los países de la región que más redujeron la desigualdad y la pobreza en la última década, afirmó la secretaria ejecutiva de la Comisión Económica para América latina y el Caribe (CEPAL), Alicia Bárcena. - Cepal elogió reducción de pobreza en Argentina, Brasil, Venezuela y Bolivia
Cuando vemos a Argentina y Reino Unido peleando por las Malvinas, terminamos entendiendo que es como los padres que se pelean por la custodia, y no dan voz ni voto a los hijos. Mucho se habla en los medios, pero ¿qué es lo que quieren los habitantes de las islas? Es que en esas islas tienen su propio gobierno, y por ende le toca a ellos decidir.
Al encontrar todos los problemas argentinos de crisis económicas y pobreza, discriminación, maltrato del gobierno hacia sus propios ciudadanos y héroes de guerra, no resulta difícil imaginar por qué los habitantes con cultura británica no desean formar parte de Argentina. ¿Cuál es la ventaja de formar parte de Argentina?
Si pretendían que los habitantes de las islas se acercaran más a Argentina, la invasión argentina de 1982 hizo un buen trabajo al crear aversión hacia el gobierno de Argentina. Es que el maltrato no gana aliados, hacer las cosas a la fuerza no aumenta la factibilidad política, sino todo lo contrario. Cuando los japoneses invadieron las islas del Pacífico, maltrataron a los habitantes, y estos mismos habitantes ayudaron a los aliados en las operaciones de limpieza contra las fuerzas japonesas. Cuando Alemania invade Francia, olvidaron ganarse a los franceses, y fueron ellos los que tomaron París antes que los aliados. Cuando EUA ha invadido países, como Irak o Afganistán, se han olvidado de ganarse a la población. Incluso en Japón, los habitantes de Okinawa no quieren la base americana de Futenma, porque los militares americanos han cometido crímenes contra la población. La historia indica que toda fuerza de ocupación que no se gana a los habitantes, tiene pocas posibilidades de mantener ocupado el territorio por demasiado tiempo, y si lo hacen, tienen poco control del territorio ocupado.
Parece que los argentinos perdieron las Malvinas, no porque la diplomacia o la guerra fallaran, sino porque olvidaron conquistar los corazones de los residentes. Si fueras un habitante de Malvinas, es poco probable que quisieras que el gobierno argentino te tratara como suele tratar a los argentinos.
Esto es lo que dice la prensa centroamericana sobre Malvinas:
Costa Rica
- ISLAS FALKLAND: PARAÍSO NATURAL ENTRE 165 MIL MINAS
- "NO TENEMOS NADA QUE NEGOCIAR CON ARGENTINA, SOMOS Y SEREMOS BRITÁNICOS"
- VETERANOS DE LA GUERRA DE 1982 REGRESAN 30 AÑOS DESPUÉS A LAS ISLAS
- "SI TUVIERA QUE DAR MI VIDA PELEANDO CONTRA LOS BRITÁNICOS, LO HARÍA"
- Malvinas, un sentimiento argentino
- Malvinenses argentinos
- En las Malvinas no quieren ser argentinos
Nicaragua
- Veteranos buscan las Malvinas y encuentran las Falkland
- Las Malvinas serán más ricas y pobladas
- Las Malvinas atrae más turistas y ofrece negocios
- Isleños dirán en referendo, qué futuro quieren
- Vengan y vean: plan isleño de seducción
Guatemala
Panama
- Una apuesta por el triunfo de la voluntad
- Vivir en el fin del mundo
- La vida en el extremo del mundo
- ‘Prefiero El orgullo’
- Dos caras de la Misma moneda
- La expedición pingüino
- A merced de los Delfines
Mercopress (blogs)
- A Panamanian view of the Falkland Islands
- Opening the Falklands to Latin America; the testimony of a Guatemala journalist
El error político
En realidad el tema de la "causa Malvinas" es un error político. Cuando hablo de error me refiero a "acto que tiene consecuencias inesperadas o indeseadas". ¿Adonde está el error? El error está en mezclar manzanas con naranjas, y tratar de hacer malabares con todas. Voy a explicarlo un poco.
Ya Argentina está teniendo un proyecto económico con política social que le disgusta a los billonarios (que algunos llaman "los mercados" en Europa) que quieren hacerle a los argentinos lo mismo que a los españoles, saboteando la economía argentina para obtener ganancias. Ya eso como proyecto es bastante complicado y requiere de muchos aliados.
Kliksberg advirtió sobre la elevada pobreza que persiste en América latina, analizó las políticas sociales impulsadas en la Argentina, criticó la inversión especulativa en el mercado de alimentos y reivindicó la necesidad de una articulación de todos los actores de la sociedad para revertir la desigualdad.
-En el último año, el precio de los alimentos a nivel internacional subió un 68 por ciento. Eso llevó a revueltas populares en 23 países en los últimos tres meses. En Haití tuvo que renunciar todo el gabinete y debieron adoptar medidas de extrema emergencia. Hubo protestas populares importantes en México por el impacto de la suba del precio del maíz. En América latina, la Cepal calcula que los alimentos subieron un 15 por ciento en los últimos meses y que eso produjo 10 millones más de pobres (se pasó de 190 millones a 200 millones). Diez millones de personas cuya dignidad humana más básica está siendo afectada.
-¿Cuáles cree que son las causas de la suba mundial del precio de los alimentos?
–Hay varias. Mediciones de Estados Unidos identifican que el 20 por ciento de la responsabilidad corresponde a la especulación en los mercados. Las inversiones especulativas dejaron las bolsas y se trasladaron a los alimentos y el petróleo. - “LA ESPECULACIÓN CON ALIMENTOS AUMENTA LA POBREZA”
El proyecto económico argentino sigue un modelo basado en economía real y no en espejismos financieros, como en España. Lo bueno de este modelo es que se basa en empleo y no en mantener el poder adquisitivo para los ricos. Ya eso disgusta bastante a los financieros, al punto de que en este momento están a la ofensiva con el tema de los fondos buitre.
La ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, sostuvo hoy que el gobierno "privilegia el trabajo y los capitales productivos" y "nunca favorece a la especulación y a la explotación de los trabajadores". Para la funcionaria, el fallo del juez Thomas Griesa a favor de los fondos buitre, que el gobierno nacional apeló en las últimas horas, "pone de manifiesto el poder de ciertos grupos económicos que no tienen patria ni ley". En un comunicado de prensa, la titular de la cartera social señaló que el magistrado neoyorkino ignoró el criterio de certeza del derecho, "perjudicando al 93 por ciento de los acreedores que aceptaron el canje, en beneficio de un grupo minoritario pero poderoso". "Los que nos critican siempre apelan al argumento de la seguridad jurídica, cuando en realidad lo que pretenden es que no haya leyes, ni restricciones ni límites para la rapiña", sostuvo la funcionaria. En ese sentido, Kirchner añadió que "como los buitres, los inmorales del capital no quieren que el mercado funcione, sino que apuestan a su descomposición para aprovechar la carroña y obtener ganancias extraordinarias". - Alicia Kirchner: "Este Gobierno privilegia el trabajo y los capitales productivos"
Ya Argentina tiene sus propios recursos, sus propios yacimientos. Meter el tema Malvinas es agregar un problema más, ya no sólo en lo económico, sino en lo político. Es complicar innecesariamente el panorama. Podrían haber acudido a la unidad latinoamericana, a la lucha por la inclusión social, o cualquier otra cosa, en lugar de las Malvinas, que destruye las posibilidades de alianzas o de no interferencia. Cuando se analiza la manera en que EUA ha ido atacando los asuntos, ha ido gradualmente, una cosa a la vez, en lugar de muchas a la vez.
Cuando se mira las políticas de Argentina (Los 5 años de la presidencia de Cristina) y sus esfuerzos orientados a la producción, se mira la futilidad de una política innecesaria e inconexa como la de Malvinas. Mejor enfocar los esfuerzos.
Desalentando las versiones que anunciaban que el año nuevo acarrearía la flexibilización de las restricciones a la compra de divisa norteamericana, la titular del Banco Central especificó que el objetivo prioritario es orientar el ahorro nacional hacia fines productivos. - El dólar en Argentina
Malvinas podrá agregar apoyo popular de corto plazo, una euforia futbolera en lo político. Pero es conveniente limpiar la casa antes de salir a predicar limpieza. La "causa Malvinas" es empezar a pelear dos guerras, hacerse de dos enemigos. Y el que mucho abarca, poco aprieta. Dicen que se ocupa pies para meterse en una pelea, y cabeza para salirse. Y por eso es que la "causa Malvinas" es realmente un error político. En eso Hugo Chávez fue más astuto, pues acudió a Simón Bolivar que era enemigo de España, pero aparte de la confrontación del "¿por qué no te callas?" realmente no ha pasado a la ofensiva, como sí lo hace Argentina con Malvinas. Chávez ha sabido manejarse entre enemigos.
Argentina realmente no es un país tan bueno en la ofensiva. Cuando Argentina invadió Malvinas, la derrota fue un alivio para los soldados argentinos hambrientos y fue un alivio para la población de Malvinas. Pasaron a la ofensiva militar para conquistar tierras, pero no conquistaron los corazones de los residentes, sino todo lo contrario. Tampoco tenían la logística para abastecer una ofensiva. Fue una pésima ofensiva.
Argentina parece funcionar mejor en el contragolpe. Lo puedes ver en el futbol cuando hay un intento de gol contra Argentina, y los argentinos reaccionan y se llevan el balón al campo contrario y anotan. Funcionó también con el hundimiento del General Belgrano que luego termina en el hundimiento de HMS Sheffield en 1982. Por eso, parece una mala movida que Argentina pase a la ofensiva. No va con su cultura.
Es mejor que Argentina se enfoque en lo que hace bien. Si los financieros atacan, los argentinos contragolpean y se defienden. Entretanto, lo mejor es ir desarrollando el país a lo interno, atacando la pobreza, la corrupción, cambiando el maltrato gubernamental hacia argentinos, y la discriminación de jóvenes hacia extranjeros, sin meterse con nadie.
Los británicos tienen una cultura distinta de la argentina. Y así como se ha acusado a los estadounidenses de no ver más allá de ellos mismos, como si todos los demás funcionaran igual que ellos, precisamente por motivo de orgullo, y así Argentina tampoco pudo ver el sentir de los habitantes de Malvinas que tienen su propio gobierno, su propia cultura, su propio sentir. Habría funcionado mejor si Argentina en su causa Malvinas hubiera tratado de resarcir el daño de la dictadura, mostrarse al mundo como país civilizado, que desea corregir el rumbo del pasado. Esos errores pasados complacerían a los británicos, y también a los veteranos argentinos de Malvinas que no desean que se enaltezca a Galtieri. Traería satisfacción a aquellos conscriptos que reclaman los abusos de oficiales. ¿Y la población? Se puede hablar mejor de conquistar corazones y no tierras.
En 1824 ocurrió una situación muy interesante. Tras la independencia, el territorio centroamericano de Guanacaste decide anexarse a Costa Rica por su propia voluntad, la voluntad de sus habitantes. Puedes buscar más sobre el tema al buscar "anexión de Guanacaste" o "anexión del partido de Nicoya". En Guanacaste pensaron que les iría mejor con Costa Rica y no con Nicaragua. Esto les salvó de sufrir las guerras que Nicaragua sufrió. Cosa distinta sucedió en España, donde Francisco Franco quiso unir a España por la fuerza, y hoy vemos a Cataluña buscando su independencia. Anexar por la fuerza, sin ganarse los corazones, jamás funcionaría.
La causa Kirchnerista
La presidente Cristina Fernández habló frente al Mercosur acerca de la necesidad de construir ideología (Mercosur: La rebelión "antisistema" de los presidentes en Sudamérica). Argentina tiene dos partidos políticos grandes. El Partido Justicialista (PJ) y la Unión Cívica Radical (UCR). La ideología del PJ está basada en el peronismo y el bienestar de los trabajadores. La ideología del UCR es la socialdemocracia. Ambos tienen un pequeño tinte de centro izquierda. Galtieri era un derechistaal que Reagan apoyó y al que llamó el "general majestuoso". Galtieri llega al poder tras un golpe, no elecciones democráticas, fue un déspota que trajo privatización, desempleo, terror, y finalmente la guerra de las Malvinas. En esta monografía sobre Galtieri se puede ver en detalle quién era Galtieri.
Cristina Fernández no es derechista, como Margaret Thatcher, ni tampoco es amante de la guerra, pues así lo ha manifestado. Por eso la "causa Malvinas" no le va, ni por ideología, ni tampoco por estilo político. A ella le va el Kirchnerismo, el peronismo, el bienestar de lo trabajadores. ¿Y que sacan de la guerra los trabajadores? Si tienen suerte, lo único que sacan es volver a casa en una sola pieza. La guerra produce deuda al país que hace la guerra. La deuda de la segunda guerra mundial de Reino Unido se terminó de pagar durante la administración de Gordon Brown. ¿Acaso el Kirchnerismo es deuda para los argentinos como la que empujó la hiperinflación argentina de 1989? Galtieri no es Cristina, y Cristina no es Galtieri, como tampoco el cielo y el infierno son lo mismo.
Malvinas no es ideología, es una obsesión, un asunto de orgullo, desconectado de la realidad actual. Estudiar la historia, usando el pensamiento crítico, es la mejor manera de evitar errores. Y la actitud confrontativa hacia Malvinas no es más que salir con los tacos de futbol de frente. Quizás la dictadura doblegaba a argentinos a punta de garrote, pero los británicos no se doblegan así, y los habitantes de Malvinas tampoco. A punta de impulsividad y emociones no se gana un conflicto, sino que se empuja a cometer errores. Mantener una posición altanera y orgullosa sólo sirve para enaltecer el ego. Y la gente con ego grande, se golpea más duro cuando les llega una experiencia que trae humildad. En política muchas veces unos querrán declararse ganadores por razones de ego, pero realmente eso es lo de menos, porque al final lo que importa en un proyecto es lograr un objetivo. Y el objetivo Kirchnerista, tendría que ser una Argentina desarrollada donde los argentinos vivan bien. Realmente Malvinas no es ni algo necesario, ni indispensable para ese sueño.
El objetivo de un país con un modelo económico distinto no ocupa de una conquista del territorio de Malvinas. Más bien ocupa de buenas relaciones para comerciar. Si los negocios han de prosperar del lado inglés, ¿no será mejor mejorar las relaciones comerciales? China conquistó al mundo y redujo su pobreza sin disparar una sola bala.
El conflicto sólo es necesario en la extrema condición cuando los objetivos de dos partes son absolutamente incompatibles. Cuando no hay conflicto, lo que aplica es la negociación, y todas las técnicas de negociación se pueden usar para ventaja mutua. La causa Malvinas en ese contexto parece causa perdida, la dictadura de Galtieri la mató cuando indispuso a los habitantes de las islas. El fallo no fue no conquistar un territorio, sino fallar en conquistar la buena disposición de sus habitantes. El día en que Argentina gane en un referendum en Malvinas, ese día la "causa Malvinas" habrá tenido éxito, y quizás esto pueda suceder dentro de unos 100 años. Hoy no parece existir una "causa Malvinas". Existe una Argentina que quiere salir de sus crisis recurrentes y ser país desarrollado, y esa es una aspiración muy válida. Pero es un camino donde un sólo error puede hacer retroceder todo el camino recorrido. No es bueno meterse en peleas que no apunten a reducir la pobreza.
Y con la discriminación hacia extranjeros, especialmente hacia otros de Latinoamérica, es poco probable que pueda haber unión Latinoamericana real hacia las causas argentinas. Puede que haya una alianza temporal política, pero sin esa integración de las gentes, al final Sudamérica tendrá sus Cataluñas y nada de "causa Malvinas". La geopolítica no es un partido de futbol. YPF no es España vs Argentina y Malvinas no es Inglaterra vs Argentina. La geopolítica es un juego delicado, y en este momento lo mejor para Argentina es atender su pobreza y volverse ejemplo para el mundo.
La pobreza en Reino Unido aumenta (UK seeing a big rise in poverty, says IFS), e incluso personas con buena educación están al borde del hambre (Increasing numbers of working people live in poverty, report finds) y la pobreza está golpeando más a los niños ingleses (Increased child poverty needs long term fix, says MP). la economía en 2012 se portó peor de lo esperado.
Chancellor George Osborne has announced a fresh squeeze on benefits, as he admitted the UK economy was performing less well than expected. Austerity measures will be extended to 2018 and Mr Osborne looks set to miss key debt-reduction targets. - Autumn Statement: Benefit squeeze as economy slows
Podrían enseñarle a los ingleses cómo se combate la pobreza y se trae bienestar a una población. Allí si que habría orgullo y conquista argentina en demostrar que en Argentina se vive mejor (y no en Malvinas), para los que quieran un poco de ego nacional. El éxito vendría cuando la gente emigre a Argentina, no sólo desde España, sino también desde Reino Unido.
Hoy el panorama frente al default posible empujado por los fondos buitre presenta un cuadro temporalmente sombrío, pero los argentinos han sabido salir adelante desde 2002, y no creo que deban volver a repetir lo que ya vivieron. Simplemente los argentinos no necesitan eso. Imagino que la manera de manejar esto sería que Reino Unido empujara para que no le paguen a los fondos buitre, a cambio de que Argentina cese de tratar el tema de Malvinas como una "causa". Sería una salida políticamente viable y honrosa para ambos lados. De otra manera, las cosas se pueden complicar mucho para ambos países, pues ante las dificultades, el político argentino acude a Malvinas para ganar popularidad. Claro, este es un razonamiento solamente. Habrá que ver si hay disposición en el mundo real.
A mi francamente me gustaría ver a los británicos y argentinos como amigos. Son dos países muy civilizados, con gente muy buena. Soñar no cuesta nada.