No creo que sea nada novedoso, pero desde hace unos años, la presión para que contratemos por teléfono todo tipo de servicios ha ido en aumento, y en estos meses de pandemia yo diría que se ha incrementado exponencialmente ¿lo veis como yo?
Me refiero básicamente compañías de telefonía, comerciales de eléctricas, a nivel de empresa, llamadas de venta de tóner para las impresoras, despachos legales de cobro de impagados, etc.
Para evitar tanta llamada, hace años que me di de alta en la lista Robinson y en casa es raro que reciba llamadas, ahora menos, porque ni siquiera tenemos conectado un aparato telefónico de línea fija, pero en el despacho seguimos recibiendo llamadas a diarios de alguno de estos comerciales.
A mí me cuesta bastante “mandarles al cuerno”, porque entiendo que la gente debe ganarse la vida y aquel o aquella comercial que te llama vive de eso, de llamar y conseguir contratos, probablemente a pocos de estos/as comerciales trabajar en un call-center de estos es el empleo con que soñaron en algún momento, buena parte de ellos están ahí porque es lo mejor que han encontrado, cuando no lo único. Por tanto, por respeto a estas personas, no a las compañías que representan y mucho menos a los sistemas que han implantado, intento atenderles.
Sé que soy raro en esto, igual que si un producto lo puedo comprar en tienda de proximidad y su precio es más o menos el que tendría en Amazon (por ejemplo), lo hago. Sé que Amazon también crea empleo, pero es evidente que lo hacen en mayor medida las tiendas de proximidad, y en todo caso, lo que si tengo claro es que las empresas tipo Amazon, pagan la mayor parte de sus impuestos en estados como Irlanda, donde el Impuesto de Sociedades es mas barato, y yo de Irlanda, salvo si voy de vacaciones, no recibo nada a cambio.
Esta misma mañana con un comercial de una empresa eléctrica que, en contra de mis propios principios, le he mandado literalmente al cuerno, indicándole que me deje de exigirme plazos !!!!. Se trata de una oferta que a nivel de empresa nos hacen para el consumo eléctrico, pero la regulación y tarifas va a cambiar en breve, por tanto, en estos momentos es difícil de comparar lo que se pagaba en el último año y lo que será en breve, además los consumos con la pandemia han caído en muchos negocios, otro dato para estar atento a lo que estamos comparando, no sea que estemos intentando comprar peras y lo que tenemos son manzanas, si vale, ambas son fruta !!!. Nos remitió unos cálculos y nos indicó que nos llamaría de nuevo, lo hizo, en plena semana santa, indicando por mi parte que no tenía todavía datos de oferta de nuestra actual compañía, y que después de dicha semana santa, si los tenía, podríamos volver a hablar.
Lo que ha ocurrido exactamente, es que al atenderle de nuevo, con pocas ganas, lo reconozco, me ha recriminado que no le firme ya el contrato porque “de eso llevamos hablando varias semanas”, ha sido cuando había que parar el carro, yo no soy su empleado, ni nuestra empresa es su filial a la que puedan darle órdenes, exigencias de plazos, etc., porque además en ningún momento de estas pocas semanas nos comprometimos con ellos, y al final este señor sigue pensando que le alberga la razón o esta es la impresión que dio.
Es evidente que esta anécdota puede ser meramente testimonial, poco habitual, etc., sin embargo, yo no estoy tan seguro de ello, la presión para que contratemos de todo por teléfono sin apenas oportunidad de leer los contratos, los compromisos que vamos a adquirir, el todo para ya mismo, me parece que con mejores o peores formas, si que es la habitualidad.
No obstante, hay que recordar que este tipo de presión se acerca mucho más a lo que tiene que soportar un empleado de su empresa y no a lo que corresponde a clientes, los consumidores no tenemos que soportar ni la más mínima presión, cualquiera que intente contratar como si nos estuviera ordenando algo, tal vez habría que recordarle que esto no es ningún ejército ni tampoco somo empleado de la empresa que representa aquel o aquella comercial.
Es que además contratar con prisas y bajo presión no es la mejor manera, nos va a provocar muchos más problemas de los que pretendemos solucionar o de los ahorros que creemos vamos a conseguir.