Al principio se le llamó recuperación asimétrica; luego fueron los brotes verdes y finalmente ha degenerado en signos esperanzadores. En definitiva estamos hablando de un argumento que se suele repetir con cierta frecuencia: “primero se observa la mejoría macroeconómica y esto se percibirá en la microeconomía o en la calle posteriormente”. Y esta frase es directamente una tontería que trataré de explicar de forma lo más simple posible.
Imaginemos un país determinado, o una economía determinada, (por ejemplo la U.E., una región determinada, una mancomunidad….). Este país, pongamos que España, está compuesto por una serie de personas. En el caso de España, estamos el que escribe y unos cuantos millones de personas más. Cada una de estas personas, se encuentra en unas circunstancias económicas únicas. Tenemos una actividad (o no), que puede ser por cuenta propia o ajena y en múltiples sectores, unos ingresos, (que pueden ser cero), unos ahorros que pueden ser negativos, tenemos unas necesidades y unas preferencias única y tomamos una serie de decisiones sobre consumo.
En resumen, existen tantas situaciones como personas, de tal forma que en todo momento unas personas estarán bien y otras estarán mal. En todo momento, unas personas estarán mejorando y otras empeorando. En el caso de que necesitemos saber, por la razón que sea, como está una persona o un agente económico en particular, tendremos que hacer un análisis con una serie de datos y sobre todo unas relaciones que en definitiva, (y de forma muy simple) es lo que nos encontramos en la microeconomía, que en definitiva no es más que una abstracción del comportamiento y datos de los agentes individuales. Y es una abstracción, porque al final hay que buscar una explicación conjunta para diversos casos. O eso o estudiamos el caso a caso, lo que es imposible.
El problema lo tenemos cuando hay que tomar decisiones o estudiar la situación de una colectividad de la gente. ¿Cómo está España?. Pues para saber cómo está España y como evoluciona nos encontramos con un problema añadido. No queda más remedio que tratar de procesar de alguna forma la situación de todas las personas para llegar a alguna conclusión. Entonces es cuando tratamos de usar las variables macroeconómicas, que nos ofrecen una imagen visible de cómo están los españoles.
Pero es importante entender este proceso. Existe una realidad compleja por persona y agentes económicos, que se puede resumir de alguna forma en datos y a su vez, unidos al conjunto de agentes y personas acaban determinando la realidad del conjunto, que se puede resumir de otra forma.
Y esto es básico; la función básica de las variables macroeconómicas es determinar las condiciones de la sociedad, de tal forma que si la sociedad está mal y las variables macroeconómicas nos dicen que la situación está bien, o cualquier contradicción que se nos ocurra, (por ejemplo, variables mejorando y personas empeorando), lo que tenemos es una aparente paradoja que se puede explicar de dos formas distintas; o bien los datos están mal, (normalmente son encuestas), o bien estamos leyéndolos mal, (que es lo más habitual).
Pero en realidad es así de simple; la macroeconomía no es más que un instrumento para percibir de forma global las realidades individuales que de otra forma no podríamos ver. Si tenemos esto claro podemos entender que para que tengamos una mejoría macro tendríamos que ver una mejoría en la micro de una parte importante de la sociedad, de la misma forma que cuando vemos una caída en los datos macro, es que estamos en un entorno en el que la sociedad se ha desplomado, (aunque no lo hayamos visto).
Este proceso se comprueba muy bien en esta crisis, tanto en el origen, como en la situación actual o en todas las veces que se nos ha dicho que la macro anticipaba la resolución a la crisis. En el origen de la situación, seguimos diciendo que todos los efectos que nos encontramos vienen derivados de la crisis, cuando en realidad es exactamente lo contrario; me gustaría recordar que uno de los primeros post de este blog era una recopilación en la que exponía que esta situación viene derivada de años de empobrecimiento de la sociedad que no fueron percibidos. No es que en 2007-2008 apareciese una crisis que llevó a la sociedad al límite; los ciudadanos llegaron a una situación en este punto que hizo que los efectos apareciesen en los mercados financieros y sobre todo se mostrasen en la macro.
Y respecto a la situación actual, en realidad estamos exactamente en el mismo punto; no es que la macro nos de una imagen buena de la situación; de hecho la macro nos muestra una imagen devastadora, cojamos el dato que cojamos. Sin embargo, en todo momento existe siempre algún dato que mejora, (o que no empeora demasiado), de tal forma que lo que podemos hacer es hablar de una mejora en la macro mirando este dato en concreto, y vender un cuento, esperando que con esto se cree una imagen que haga que la gente mejore. Lamentablemente esto es ridículo y absurdo.
Supongo que alguien me dirá que hay que tener ciertas cautelas con los datos macro, y me recordará la existencia de “indicadores adelantados”, (curioso termino cuando normalmente son datos pasados), o datos que indican “bases sólidas”, (otra frase mítica). Es cierto que cuando hay una mejoría en la sociedad, (o un empeoramiento), esta se manifiesta en primer lugar en una serie de variables. Es decir, si las condiciones de la gente mejoran, es normal que se compren determinados bienes que ahora se limitan, y que no supongan una inversión importante. Es normal que cuando la gente empiece a mejorar, que mejoren las ventas de textil, restaurantes… Por lo tanto, unas recuperaciones en estos sectores indicarían que la gente está mejorando, y de alguna forma se pueden considerar “adelantados” si entendemos como adelantados aquellos puntos en los que la mejoría se ve en primer lugar.
Pero por supuesto, debemos tener en cuenta que cuando hablamos de macro, estamos en una situación en la que cada dato en particular no sirve absolutamente de nada. ¿Por qué?. Pues sencillísimo; cada dato macroeconómico es una pieza de un puzle que completado nos serviría para conocer la abstracción de la realidad económica del país. Por entendernos, pretender sacar conclusiones de un dato en particular, es equivalente a decir que podemos describir la torre Eiffel, cogiendo una pieza de cualquier puzle en el que salga dicho documento. Si lo completamos podremos tener una aproximación de lo que es el monumento, pero ojo; que siempre será una ilustración.