En los medios se recoge lo siguiente publicado por europa-press en el contexto de la campaña para las elecciones al parlamento europeo:
“El senador cordobés y portavoz de Sanidad del PP en el Senado, Jesús Aguirre, ha asegurado este lunes que "la desigualdad social y la pobreza infantil en España han bajado a niveles inferiores a los que había antes de la crisis", todo ello, a su juicio, "gracias a las medidas puestas en marcha por el Gobierno de España del Partido Popular””
“Aguirre se ha referido a una encuesta de condiciones de vida del Instituto Nacional de Estadística (INE) para apuntar que la tasa de riesgo de pobreza en España para menores de 16 años cayó un 1,2% en 2013, hasta situarse en el 27,7%. "Es un primer indicador que nos devuelve a niveles inferiores a los que había antes de la crisis pero que indican que debemos seguir trabajando", ha aseverado”
“Además, el senador cordobés ha enumerado varias iniciativas puestas en marcha por el Gobierno de Rajoy para combatir la pobreza infantil, como un Plan de Infancia dotado con unos 5.000 millones de euros "para garantizar el bienestar de los menores", y un Plan Nacional de Inclusión Social provisto con unos 136.000 millones de euros.”.
Estas afirmaciones son el instrumento perfecto para conocer al tal Jesús Aguirre, que a su vez en tan pocas palabras es capaz de mostrar todo lo peor de los políticos y las razones de lo que se ha venido a llamar desafección.
En primer lugar, llama poderosamente la atención el hecho de que se haya ido a buscar una estadística aún no publicada para defender sus argumentos. ¿Cómo es posible que la tenga este senador antes que el público?, ¿no genera dudas sobre el INE?.
Pero si vamos a más demagogia, nos encontramos con los 136.000 millones que tienen bastante trampa. No hace falta más que ir para la página 93 del plan nacional para la inclusión social 2013-2016 para entender que en principio estamos hablando de los datos de cuatro años y que la inmensa mayoría de la partida son los 87.000 millones para: “Garantizar un sistema de prestaciones para apoyar económicamente a las personas vulnerables”, lo que por cierto viene a ser el capítulo de prestaciones por desempleo que recordemos fue modificado para reducirse en 2012.
Pero volviendo a la reducción de la pobreza en el grupo de edad de menos de 16 años, es absurdo que se le ocurra usar precisamente este indicador; no hablo de buscar la mejora en uno de los muchos tramos de uno de los muchos indicadores que nos encontramos. Es absurdo porque precisamente la encuesta de condiciones de vida ha facilitado una mejora de la pobreza relativa en general debido a que se calcula como aquellas personas que tienen unos ingresos inferiores al 60% de la mediana de los ingresos. Dado que todo el mundo gana menos, oficialmente hay menos pobres, aunque la realidad que esto pasa precisamente porque hay más personas con dificultades. En realidad este fenómeno es lo que ha provocado que se abandone este indicador.
Para esto no hace falta más que ir al plan nacional que antes mencionaba el propio senador, y leer algunas perlas, como por ejemplo a partir de la página 15 (y las negritas no son cosa mia):
“Los pobres en España son “más pobres”, porque, debido a la crisis económica, se ha reducido el umbral de renta de referencia (desde unos 7.700 euros en 2009 para una persona sola hasta algo menos de 7.200 euros en 2012).
Como es bien sabido, la tasa de riesgo de pobreza tiene carácter relativo, pues identifica como pobres a las personas que viven en hogares con ingresos por debajo de un cierto umbral, habitualmente el 60% de la renta mediana, pero no tiene en consideración si ese umbral permite o no alcanzar y mantener mínimos de subsistencia/bienestar.
La población en España tiene en la actualidad una renta media inferior a la de 2008. Según datos de la Encuesta de Condiciones de Vida, la renta anual neta media por unidad de consumo era de 14.214 euros en 2008 y de 13.885 euros en 2012. Por tanto, la renta media ha disminuido a partir del año 2008 (un 2,3% entre ese año y 2012) y, además, el coste de la vida se ha elevado (10%, aproximadamente).
La caída experimentada en la renta media y la renta mediana ha conducido a una disminución del umbral de la pobreza, desde unos 7.800 euros en 2009 para una persona sola, hasta algo más de 7.200 euros en 2012, en términos nominales. El efecto predecible es la salida de la pobreza (relativa) de individuos y hogares con rentas cercanas al umbral de pobreza (en caída), esto es, una caída de la tasa de riesgo de pobreza (especialmente para colectivos con rentas bajas pero estables) pese al empobrecimiento general que supone la caída de la renta de un país.
Además, las formas severas o intensas de pobreza se han agudizado. En los últimos años se ha duplicado el número de hogares que no tienen ingresos (más de 600.000 en 2012). Y más de 4 millones y medio de personas viven en pobreza severa (40% renta mediana)14.
El número de hogares sin ingresos (remuneración del trabajo, prestaciones por desempleo o de la Seguridad Social) ha pasado de 2,12% en el año 2007 a algo más del 3,5% a finales del año 2012 (datos de la Encuesta de Población Activa). Esto supone que unos 630.000 hogares sobreviven sin ingresos en la actualidad, más del doble que en el año 2007.
Las formas de pobreza más severas han tenido un aumento muy elevado en España. En 2008, un 6,8% de la población tenía ingresos inferiores al 40% de la renta mediana,
porcentaje muy elevado respecto a la Unión Europea (5,2%). En 2011, se llega a un 10,1% de personas viviendo bajo el umbral de renta citado (5,7% de la Unión Europea). Ello supone que algo más de 4,6 millones de personas viven esta forma de pobreza severa, 1,6 millones más que en 2008.
La pobreza infantil afecta a algo más de 2,2 millones de menores en España, 300.000 más que en 2008. Más menores pobres que, además, sufren formas de pobreza más severas que hace unos años. Las distancias con la UE se han acrecentado.
La extensión de la pobreza infantil en nuestro país es un hecho constatado desde antes de la crisis. En el año 2008, el 28,2% de los menores vivían bajo el umbral de la pobreza, porcentaje muy superior al que registraba la Unión Europea (20,4%), En 2012 se llegó a una tasa de riesgo de pobreza infantil del 29,9% en España, cifra superior a en 1,7 puntos porcentuales a la registrada en 2008. En la Unión Europea, el aumento de la tasa de pobreza infantil entre 2008 y 2012 ha sido la mitad que el de España (+0.8 puntos porcentuales).
El Informe de UNICEF (2012)15 muestra la gravedad del impacto de la crisis en la infancia:
“hay más niños y niñas pobres” (2,2 millones en 2011, 300.000 más que en 2008), que “son más pobres” (por la reducción del umbral de ingresos que se considera para medir el riesgo de pobreza), la “intensidad de la pobreza también es muy alta y creciente” (el 13,7% de las y los menores en España vivían en hogares con un nivel de ingresos por debajo del 40% de la mediana, cuatro puntos porcentuales por encima del registro de 2008) y “se está haciendo más persistente” (mayor incidencia y aumento de la pobreza crónica entre las y los menores).”
Sólo con esto, y con la situación que el gobierno expone en el plan nacional para la inserción social, se pueden sacar conclusiones que distan mucho de exponer que la desigualdad social y la pobreza infantil ya han bajado a niveles previos a la crisis; ahora que si lo que quieren es mentir, confundir o jugar al despiste metiéndose incluso con Caritas para negar una realidad que es muy evidente, allá ellos.
El hecho de que nuestros representantes tengan una capacidad intelectual nula o sean directamente unos mentirosos manipuladores sí que es un problema nuestro que espero que se recuerde el 25 de mayo.