Una frase que se está poniendo de moda es la necesidad de acometer una reforma del mercado de trabajo que flexibilice la contratación de trabajadores. Y es curioso, porque la realidad es que resulta extraño. Vamos a asumir que quien afirma esto es sincero y no está lanzando una campaña de marketing para colarnos otra cosa, y tratar de entender la frase en la que coinciden tanto la Patronal, como el gobierno socialista (donde por una vez están de acuerdo ZP, Salgado y Pepe Blanco) y el Partido Popular.
Desde luego lo primero que sorprende es que todo el mundo parezca estar de acuerdo, y sin embargo todo el mundo esté en desacuerdo, diciendo lo mismo ¡textual!.
El problema está cuando tratamos de analizar cuáles son las propuestas que existen encima de la mesa para facilitar la contratación sin abaratar el despido, y la realidad es que no he visto ninguna.
En medio del batiburrillo, a veces oímos que existen muchos tipos de contrato en nuestro sistema lo cual parece ser que es un problema para una contratación flexible. Pero yo sinceramente no lo acabo de entender, ya que cuantas más formulas nos encontremos, más posibilidades y por tanto más facilidad para contratar, ¿no?. Por lo menos es lo que nos cuentan las compañías de móvil en su publicidad. Curiosamente, si entramos en la web de cada compañía de móvil, nos encontramos con una cantidad apabullante de posibilidades y contratos para adaptarse a nuestras necesidades. ¿Se están equivocando en su táctica o es que realmente el tener muchos tipos de contratos es lo que diseñan para facilitar la contratación?.
Si las empresas contratan personas, al igual que nosotros contratamos líneas de móvil, ¿Por qué es más flexible un contrato único que una gama de contratos?. A ver si lo aclaran un poco.
Las empresas pueden hoy contratar de mil formas, bien con carácter indefinido, bien con carácter temporal, (pudiendo poner mil y una excusas en los contratos que nadie va a mirar), o incluso pueden acudir a una empresa de trabajo temporal; Pueden contratar por horas, por semanas, pueden ser fijos discontinuos, de sustitución, de interinidad, de obra, por acumulación de tareas y luego con unas condiciones y otras dependiendo de si es mujer, si es mayor de 45 o menor de 35, o víctima de violencia de género….
¿Qué problema hay para contratar con varios tipos de contratos a cada persona?. ¡Pues la realidad es que no parece que sea justificada la necesidad de flexibilizar la contratación, no el despido!.
Puede que hablen de los tramites de la contratación y el papeleo que hay que hacer, pero vamos el alta es un formulario para la seguridad social que se puede presentar telemáticamente, o en persona o anticipar por fax, y un contrato de trabajo en el que hay que cubrir los datos. No es que sea un procedimiento excesivamente complicado para desistir de esto. Y hombre, realmente es incluso más flexible que las altas en las compañías de los móviles. Por lo tanto parece que aquí no hay problemas. En todo caso, no he visto ninguna propuesta al respecto.
Sinceramente, si el problema es “abaratar la contratación, no el despido”, la realidad es que tampoco el pasado reciente apoya la tesis de que aquí tengamos un problema demasiado grave. A fin y a cuentas, con esta legislación hemos sido líderes en creación de empleo, de forma que hemos tenido que traer inmigrantes de forma masiva. Y por cierto, uno de los problemas que todo el mundo plantea es que este empleo era “barato”.
En todo caso, lo que sorprende más que se nos aclare que no se busca abaratar el despido, sino abaratar la contratación y luego las propuestas, se centran básicamente en las formas de despedir. En consecuencia, estamos en lo de siempre y llegamos a la misma conclusión. Esta frase no es más que una frase de publicidad, y que por cierto si fuese publicidad debería ser catalogada como publicidad engañosa. En este sentido debemos entender que se puede defender el despido barato, pero no se debería defender el despido barato diciendo “no se busca despido barato”, porque eso tan sólo es un intento de engaño, a veces consumado.
¿Voy a contarle yo a Vodafone que me quite los problemas para darme de baja para facilitar la contratación de líneas?. Yo le puedo decir: “quíteme la permanencia o simplifique el procedimiento para cancelar el contrato, porque esto será bueno para usted, ya que se simplifica la contratación”. Pensemos que al final es lo mismo, si yo intento vender mis horas de trabajo, me están pidiendo que no ponga ningún problema, pero cuando una empresa intenta vender, nadie pone en duda las indemnizaciones resolutorias de contrato, (aunque por cierto estén prohibidas y tan sólo podamos resarcir a las empresas de gastos).
Si es tan fácil contratar como dar un alta en un móvil, ¿Cómo es posible que sea más fácil despedir que darte de baja del ADSL?. ¿y de la compañía de mantenimiento del ascensor que me pide 2 años y medio de cuotas de indemnización?, ¿Probamos a cancelar el 2 de noviembre un seguro que nos ¡van a renovar! el 5 de noviembre?. ¿cancelamos una hipoteca sin pagar comisiones?. ¿o una imposición a plazo sin penalidad?.
Curiosamente todo el mundo entiende lo que significa la palabra contrato hasta que añadimos el epígrafe “de trabajo”. Y si le damos la vuelta a los argumentos y pensamos en los contratos normales, a lo mejor entendemos algunas cosas que simplemente no nos paramos a preguntar:
- ¿Contratamos los ascensores porque necesitamos el mantenimiento o por el coste del fin de mantenimiento?.
- ¿contratamos las hipotecas por el coste de cancelación o es el último elemento que miramos?. (¡a menos claro que pretendamos cancelarla, claro!).
- ¿Si no nos comprometemos con los contratos de permanencia no es porque no queremos estar atados?.
Está última pregunta me lleva a una nueva: Quedamos en que se trata de abaratar la contratación, pero no el despido, (aunque luego se pida abaratar el despido), y con el fin de proporcionar empleos estables. Curioso, porque nadie piensa en el coste de despido cuando piensa en la estabilidad, (y menos con los períodos de prueba que tenemos). Por tanto quizás cuando se nos diga que el problema es que hay una gran masa de trabajadores temporales, y que eso es algo que debemos evitar, estamos haciendo marketing para conseguir convertir a todo el mundo en temporales.
Seamos serios, lo que se busca en la reforma laboral es abaratar el despido, por supuesto, se nos garantiza que no va a ser retroactivo, pero la realidad es que esto es otra gran frase de puro marketing. Porque tampoco es cierto. Vamos a ver si lo explico. Hoy si una empresa no tiene otra forma de salir de la crisis, salvo despedir al personal, y lo demuestra puede despedir pagando 20 días de salario por año con un máximo de 12 mensualidades en el peor de los escenarios para la empresa. Pero si de repente se pone que una caída del 10% de los pedidos permite despedir al 10% de la plantilla, está clarísimo el resultado. Todos los que tienen hoy contrato indefinido tienen despido barato. Tanto como condiciones se creen.
Por supuesto, la gran diferencia está en el matiz nuevo y este es que hasta ahora se pagaban las indemnizaciones sólo si es el último recurso, a partir de la reforma va a ser un recurso más; y debemos recordar que lo de invertir y mejorar es algo que en muy pocas empresas se presenta ni tan siquiera como opción.
Por supuesto, nos encontramos con otra gran frase del marketing que es aquella de que se favorecerá la movilidad a otros sectores más productivos, dado que este es el principal problema de la economía española. Al final parece que los trabajadores no nos vamos a todas las empresas de alta tecnología que tenemos. ¿Existe mucha diferencia entre un contable de una empresa aeronáutica y el de una constructora?, ¿el mensajero es distinto?, ¿el operario de la máquina?, ¿el guardia de seguridad?. ¿no será el problema que no hay empresas que generen valor añadido porque simplemente sale más barato producir con empleados baratos, productos que van a ser protegidos en los mercados mediante cuotas, subvenciones, normativas absurdas y demás?.
En definitiva, lo que nos vamos a encontrar tras toda esta campaña de marketing es que va a haber unos cuantos trabajadores que se van a ir a la calle, cobrando menos indemnización por el despido, ya que se van a incluir muchas más causas, y va a ser la opción preferida.
Esto es algo que va a beneficiar a las cotizadas, porque son energéticas, concesionarias, constructoras y entidades que en general tienen un gran poder de mercado para no sufrir los efectos secundarios de las bajas laborales, a la vez que son las grandes beneficiadas de despedir, para al día siguiente volver a contratar a nuevos trabajadores, que no van a ser mejores, sino más baratos.
Hoy es complicado negociar en un contexto de despido libre, (por cierto, una frase recurrente es que no se pide, olvidando que no se pide porque salvo casos muy concretos ya existe), y normalmente barato, con un paro disparado y estructural por una política inmigratoria diseñada para tener un exceso de trabajadores constante, (otra de las quejas tradicionales es la de que siempre tenemos exceso de parados, olvidando que en todo momento se han traído más inmigrantes que en ningún otro país, con lo que es difícil no tener record de paro), unos sindicatos completamente desactivados.
Pero desde luego podemos imaginar el escenario en el que se va a negociar después, y de esta forma acabando definitivamente con los sindicatos, (que ya hasta aceptan el modelo austriaco que es el ejemplo que se ponen en todos los manuales de mercado liberalizado). ¿Qué pasará con el precio del trabajo?. Pues es fácil. Si no tienen contrato de permanencia en el móvil llamen a su compañía ahora mismo y díganle que se quieren cambiar. ¿Qué creen que hará el vendedor?. Pues eso.
Y la bajada de sueldos, ¿a quién va a beneficiar?, y la respuesta es obvia otra vez, a aquellas empresas que tengan un amplio poder en el mercado, que les permita no sufrir la caída de la renta disponible a la vez que se benefician de las bajadas de sueldos. ¿Quién pierde?. Los primeros los trabajadores que pierden su sueldo, y segundo bares, agencias de viaje, comercios, cines…. Y en general todos los que no tienen asegurado los clientes o en su defecto subvenciones para aguantar.
Y a lo mejor es por esto por lo que entendemos de donde vienen todas estas recomendaciones, para flexibilizar el mercado laboral más flexible de la OCDE, (con la excepción de Irlanda). ¿o no ha sido esta la economía que más empleo generó en su día y la que más empleo destruyó?. ¿Esto es rigidez?. O más bien, será la frase de marketing que resume toda la situación: ¡Tenemos un mercado laboral muy rígido!. Que nos lleva a la de la inflexibilidad y el poder de unos sindicatos que en realidad han tragado absolutamente todo ¡parando huelgas!, ¿quieren saber como digo que los sindicatos no tienen ningún poder?, (Por su culpa y de los trabajadores que los hemos dejado hacer y no reaccionamos).
Es sencillísimo, la patronal tiene tanto poder, que se puede permitir lanzar todo tipo de mensajes tan manifiestamente manipuladores, sin que nadie salga a decir nada. Piénselo. ¿Quién tiene el poder para decir esto de “aprovecha tu banco”, o lo de “cambia para ganar”, sabiendo la situación real de lo que ocurre?.
Por cierto, para que entiendan el poder que tengo yo, ¡intento ser sincero!. (Sí, ¡tan piltrafilla soy!)