En un post he tratado de exponer que el euro plantea un grave problema. En definitiva, el problema grave es que estamos asumiendo que economías muy distintas comparten una misma moneda, lo cual es en esencia insostenible en el tiempo.
En este sentido, las conclusiones son sencillas; o bien se igualan las economías de la zona euro, o bien el euro va a estallar por los aires. Debo recordar que el hecho de que las economías se igualen lo que quiere decir es que todas las empresas tengan el mismo escenario, tanto aquí como en Berlín, los trabajadores las mismas condiciones,… En definitiva que tengamos la misma situación que nos ha de llevar a la conclusión de que tengamos en síntesis niveles parecidos de precios, pensiones, productividad y en general todas las variables relevantes.
En otro post, he defendido que Grecia, (y por similitudes) España, han de salir del euro, para tener opciones de salir de esta crisis. Y al final Occam, me ha hecho una consulta en relación a la posible salida de Alemania del euro.
En este sentido, lo cierto es que hay varias teorías al respecto. Algunos dicen que necesitamos dos o tres monedas, otros que se tienen que ir Grecia y los países periféricos y por otro lado nos encontramos con aquellos que defienden que Alemania tiene que irse del euro. Lo curioso es que frecuentemente en estas teorías se dice: “para salvar el euro hay que….”.
En el fondo no dejan de ser teorías un poco surrealistas, y no acabo de entender la justificación. Voy a tratar de usar un símil para tratar de entender estas opciones.
Imaginemos cualquier asociación, como puede ser una empresa con varios socios que tienen ciertos problemas. La realidad es que o se solucionan los problemas o de alguna forma romperá. Puede irse uno de los socios, podemos dividir la empresa en dos o en tres o podemos liquidar la empresa y repartir los activos entre cada uno de los socios. En todo caso, la realidad es que la empresa tal y como era, habrá cambiado.
¿Qué diferencia hay entre que se vaya Alemania del euro o que se vaya Grecia?. Pues la misma en que en un matrimonio se vaya una persona o que se vaya otra. Es así de simple. El hecho de que se vaya uno de los países, o el hecho de que el euro se divida en dos o tres monedas distintas, significa que el euro como lo conocemos deja de existir. La única diferencia estriba en cuantos trozos quedan.
Si hay tres euros, el euro se habrá roto y entonces tendremos varias monedas; pero esto significará que no estaríamos en una unión monetaria. Si Portugal, Grecia, Irlanda y España conforman una única moneda, y el resto de países otra, lo que tendremos son dos uniones monetarias, al estilo de ahora que tenemos la libra y el euro, como áreas monetarias en la unión europea. Pero lo que está claro es que varias uniones no es una unión, sino una desunión con posibles bandas.
El hecho de que un país abandone el euro, por otra parte, implica un golpe a la moneda única, y lo cierto es que el impacto sobre la moneda dependerá de quien se vaya y quien se quede. Es como en una empresa, donde el hecho de que un socio abandone la empresa, influirá sobre esta, en función de quien se queda. En consecuencia, lo que está claro es que si se va Alemania, el euro, seguirá teniendo grandísimas diferencias entre los países que quedan. Es evidente que después no podríamos concluir que Alemania sea el problema. Pero las tensiones las trasladaríamos a Francia, Dinamarca, Holanda…. Si nos damos cuenta, seguiríamos manteniendo la situación de enfoques económicos muy distintos, manteniendo la misma moneda.
Es exactamente el mismo caso de que Grecia abandonase el euro. En caso de que Grecia abandonase el euro, seguirían las tensiones por varios países.
En todo caso, evidentemente la situación no sería similar ante un abandono de la moneda por parte de Alemania o de Grecia. En el primer sentido, el euro simplemente perdería todo el sentido, ya que existe una identificación muy clara entre la política monetaria germana y el euro, identificación que no existe en el caso del resto de los países. La realidad es que el euro, lo podemos llamar el marco ampliado, y en el caso de que Alemania abandonase el euro, la realidad es que tendríamos una situación que podríamos ver gráficamente como un marco y un euro, que tendría las características de los países periféricos. Técnicamente nos quedaríamos con el nombre, pero la realidad es que la esencia del euro, variaría de forma sustancial. Por supuesto, esto no se entienda de forma negativa. España, Grecia, y otros no podemos tener la misma moneda que Alemania, por lo que si intentásemos mantener el mismo esquema de funcionamiento, no tendría ningún sentido.
Dicho de otra forma, si hay que salirse de la moneda es para devaluar; ya que no tiene sentido salirnos porque no aguantamos la misma moneda y hacer lo mismo.
Por supuesto, dado esto, no tiene demasiado sentido que sea precisamente Alemania la economía que salga del euro, porque es como quitar a la moneda la economía que la representa.
Y por supuesto, hay otros motivos para que sean los países periféricos los que voluntariamente abandonen en el euro, en lugar de Alemania.
Al final todo el mundo entiende que en una economía, solo hay una cosa peor que devaluar, y es no devaluar cuando no hay otra opción. Es así de sencillo. Devaluar una moneda al final es tratar de reflejar en el precio de una moneda, el valor de la economía. Devaluar significa asumir que la economía no funciona como la economía a la que nos anclamos. En este sentido al devaluar estamos asumiendo que la realidad es que España o Grecia no son Alemania, lo cual nos penalizará en inversiones; pero debemos tener en cuenta, que a pesar de que la devaluación es lo que desencadenará el proceso, la realidad es que son las diferencias económicas las que nos penalicen. Dicho de otra forma; no nos penaliza devaluar, sino que nos penaliza el hecho de que nuestra economía vaya mal. En este sentido, tras las devaluaciones, y siempre que no se esperen más lo normal es que los inversores vuelvan. Esto es fácil de ver contestando a una pregunta rápida: ¿Dónde invertiría?, ¿En un sitio donde espere revalorización de la moneda o en un sitio donde espere devaluación en el futuro?.
Lo que se espere en el futuro, va a depender de la evolución económica y de la situación actual. Está claro que cuanto mejor vaya la economía, más inversiones se atraen y en consecuencia, el mensaje de la devaluación es un mensaje claro de que la cosa está mal. Pero por otro lado, el caso de una moneda sobrevalorada, implica que no se va a revalorizar y que existe el riesgo claro de la caída de la moneda, por lo que una devaluación salvaje también llama a las inversiones, porque aumenta la posibilidad de que la moneda suba en el futuro.
Es fácil asumir por tanto que la salida del euro, o lo que viene a ser la desvinculación de la economía Alemana, le interesa más a todos los países que no son Alemania. ¿Por qué va a abandonar el euro Alemania, si los interesados son el resto de los países?. Tenemos que tener en cuenta que Alemania no tendría los efectos beneficiados de una devaluación, sino más bien los contrarios, y en cambio sí tendría los efectos secundarios del certificado de situación mala desde el punto de vista económico.
Por supuesto, esto nos lleva a un detalle de carácter lógico, que sirve también para defender que somos los países periféricos los que debemos abandonar el euro. Voy a usar otro simil; imaginemos que somos un matrimonio y que por lo que sea, decidimos que no podemos seguir juntos; podemos acabar como amigos o podemos romper relaciones completamente. Pero desde luego, el que no aguante en casa, sólo puede hacer una cosa: irse. Puede pedir que se vaya la otra persona e incluso hacerle la vida imposible, pero en realidad, si no puedes estar bajo el mismo techo que otra persona, toca irse.
Si Grecia o España tenemos que dejar de compartir moneda con Alemania, la realidad es que nos toca irnos, porque no podemos echar a nadie del euro. Realmente, la decisión que puede tomar cada uno de los países es: ¿Se puede seguir en esas condiciones?. Y en caso de que la respuesta sea que no; Puede luchar por que se den las condiciones para mantenerse, o puede irse. Lo que no puede hacer es pedir al que le interesa estar, ¡que se vaya!.ede hacer es pedir al que le interesa estar, ¡que se vaya!.