Ese famoso 25 de agosto, hubo también espacio para los post relacionados con el entorno de las empresas y sueldos. El primero, (también publicado en expansión), fue el post que menos trabajo me ha costado en mi vida.
La realidad es que en esa fecha (y hoy, a pesar de llevar unas cuantas reformas), se nos intenta convencer de que estamos ante un mercado laboral demasiado rígido. Por supuesto, a lo largo de este año he discrepado un poco de tal circunstancia, y supongo que los millones de despedidos igual lo pueden atestiguar. Pero es interesante saber qué es lo que decían los empresarios.
Por casualidades de la vida llegó a mis manos una conferencia en una cumbre España-Alemania, en la que sentaba cátedra el entonces presidente del círculo de empresarios. La citada conferencia fue en 2002, y el señor se vanagloriaba de la flexibilidad del mercado de trabajo, de las liberalizaciones habidas y de lo bueno que eran los empresarios.
Se lamentaba el señor empresario, solo de que no habíamos llegado al nivel de Irlanda, y USA, y se permitía recriminar a Alemania y Francia que lo estaban haciendo fatal en estos temas. El post se llama “La óptica empresarial”, y desde luego es casi completamente un copia y pega de la conferencia, (con su link a la página del círculo de empresarios).
Es difícil encontrar un documento de igual calidad que esa conferencia, donde podemos extraer dos conclusiones claras. Pone una lista de países que lo estaban haciendo bien, (hoy estamos todos en gravísimos problemas) y otros que lo estaban haciendo mal, (hoy nuestra esperanza), siempre según su punto de vista. Lo que aún no acabo de entender es que hoy en día se piden exactamente las mismas cosas que se pedían de aquella y en el mismo sentido. Quizás en el 2002 pudiesen colar, pero ¿no va siendo hora de cambiar el discurso?. Es que está película ya sabemos como acaba.
La pena es que esta miopía, (porque nos lleva a todos al desastre, incluido a gran parte de los que las proponen), es que no se dan cuenta de lo que significa abaratar el despido, (bueno, lo que significa), en lo que se refiere a las ventas. ¿Tan difícil es ver que una persona con un contrato precario se va a pensar más cualquier compra que una persona que tenga ingresos estables?. Pues esto parece que no lo tiene en cuenta ni Edmun Phelps ni toda la cohorte de expertos que por ahí pululan que animan a que España camine hacia el despido libre, (aunque se quería decir gratis, porque libre ya es). La pregunta que se debe hacer es ¿Es una buena formula el despido libre para la crisis?.
Por supuesto la precariedad tiene bastante que ver con la negociación de los sueldos, (cuanta mayor precariedad menos capacidad para negociar y en consecuencia sueldo inferior), que son algo más que una partida del gasto de las empresas. Ese era el tema del post de “los sueldos”, donde trataba de desarrollar que los sueldos son un gasto para la empresa, son una variable para decidir cómo se produce y es lo que define los presupuestos de muchísima gente y en consecuencia lo que compra.
Lo cual me llevaba a otro post que era el de “Modelos productivos y económicos”. De aquellas se hablaba de la necesidad de cambiar el modelo económico, (igualito que hoy), pero la pregunta es muy obvia: ¿Qué modelo esperamos en un entorno en el que se facilita la flexibilidad laboral, en el que los clientes de las empresas tengan ingresos bajos y poca estabilidad, mientras rescatamos a los que fomentan la especulación y entregamos todo para salvar burbujas?.
¿Alto valor añadido o produciremos bajo valor añadido porque es lo que se puede comprar?.
¿Inversión productiva o financiera?. Si al final rescatamos los mercados financieros a costa de lo demás es sencillo.
¿Qué tipo de modelo vamos a tener si manda la banca o los mercados?.
Es un poco surrealista. Resulta que el año ha transcurrido y han bajado los sueldos a todo el mundo, se ha aprobado la reforma laboral que introduce más flexibilidad y hoy conocemos que Grecia ha contratado a Deutsche y HSBC para las privatizaciones. O sea que les pagan por que hagamos lo que ellos quieren.
Esto es lo que hemos cambiado…