Ya he hablado de la costumbre tan gallega de la retranca y la ironía. En un post en el que hice una recopilación de ciertos post con cierto tono, exponía el problema de que a veces es muy difícil transmitir dicha sensación por internet.
Pero una vez más me he visto superado por los acontecimientos, porque el mayor problema no es ya que el nivel de burradas que tenemos en los medios y en los gobiernos es tan salvaje, que cuando se trata de exagerar es posible que te tomen en serio. El problema es que tratando de exagerar la realidad para llevarla al extremo, estamos corriendo el riesgo de dar ideas.
Esto viene porque esta semana ha sido especialmente dada a la aparición de ciertas noticias, que no se pueden entender como desde un increíble ejercicio de superación. Una de las más simpáticas nos la proporciona nuestra querida ministra Ángeles Sinde; mujer atractiva donde las haya, aunque menos que inteligente.
Pues resulta que esta bellísima persona ha tenido la brillante idea de soltar lo de que habrá que buscar alguna forma de retribuir la cultura. Por tanto espero que esta encantadora y eficiente señorita use la idea que he puesto en mi carta a los reyes magos y que repetí y amplié en el balance de 2010 en rankia.
¿Quién me lo iba a decir?. Resulta que soy una persona que tiene un sueldo y que aparte decide juntar letras en un blog, y al ritmo que vamos, ¡va a ser más fácil cobrar por esto que por trabajar!.
Cualquiera le dice ahora que realmente en estos post en los que defendía la necesidad de una paguita para el menda que se dedica a escribir en un blog era una forma exagerada de decir que esto está alcanzando unos niveles muy absurdos. Claro que podemos decidir si lo que hago yo es cultura o no, pero en el mismo problema se encuentran unos cuantos cineastas, cantantes y demás.
Los del PP, concretamente en la Xunta, han caído en la bondad de la medida y ha recordado que los creadores tienen que comer. Espero que se entienda que no voy a ser yo el que trata de pedir que los creadores no coman. Pero vamos, tendrán que hacer lo mismo que hace todo el mundo: ¡buscarse la vida! Y tratar de hacer algo que los demás quieran comprar, (sea trabajo, un bien o un servicio).
¿Qué la cultura solo la aprecian unos pocos y eso no da para vivir?. Pues va a ser una cuestión de escasez, y sólo hace falta que se pongan en contacto los pocos realmente cultos con estos que no logran vivir de su creatividad. ¡Y ambos estarán interesados!.
Por qué aunque esta excelentísima señora, lo que no aclara es quién, que y como va a elegir lo que es cultura y lo que no. Por esto quiero reiterar que los que van a elegir quien se va a llevar las retribuciones son unas grandísimas personas, inmensamente preocupadas por el desarrollo cultural de aquellos que hoy no pueden comer, (¡anda mira… como los creadores!).
Para conocer los procesos de selección, estoy seguro que tiraremos del libre mercado, ahora que tenemos a todo el mundo consagrado a esta fe. Sin embargo, como en las religiones donde de vez en cuando le damos un revolcón a todo y reinterpretamos todos los dogmas, en el campo económico, (y el campo cultural parece que va a ir por el mismo camino), estamos redefiniendo todo esto.
No tengo claro si esta nueva redefinición se basa en que las dos tardes en las que se iba a aprender la economía nuestro insigne presidente, (espero que me perdone el post de El presidente de la infamia), o si me toca volver a hacer la carrera de económicas, que está claro que no he aprovechado demasiado.
Esta misma semana, nos hemos encontrado con medidas expeditivas para que las entidades financieras no compitan, supongo que porque cuando se compite siempre ocurre que alguien puede perder y esto no se puede permitir bajo ningún concepto en este nuevo esquema de pensamiento basado en ¡la competitividad!. Lo dicho; o bien alguien se ha liado un poco, o yo estoy muy perdido. Pero debo reconocer que mi mundo se ha venido abajo con la noticia de que Zapatero apoya a Alemania en la propuesta de declarar que China tiene una economía de libre mercado.
¡Cuán equivocado estaba!; yo creyendo que el libre mercado iba de libre mercado y competencia justa, pero resulta que esto va de ¿tienes pasta o no?. ¿Qué tienes la pasta, en este caso, los chinos, bancos y grandes empresas?. Pues de la misma forma que en otros tiempos se compraban los títulos, (que incluían en el precio cierta honorabilidad que a su vez servía para conseguir más negocios y por tanto más dinero, en muchas ocasiones sin demasiada honorabilidad), ahora resulta que tener el control del dinero, sirve para que todo sea calificado como apto para los dogmas. No se me ocurre otra forma de explicar que lo de China y los bancos se confunda con algo parecido al libre mercado, y por supuesto tampoco se me ocurre ninguna forma de explicar cómo es posible que con dinero se consiga que se quiten los pocos elementos de competencia y directamente la competencia.
Y ya que estoy en plan aprender lecciones, me gustaría acabar con una lección que me ha dado el presidente Griego. Dado que parece que el plan antiguo, (que ya era muy salvaje) no acaba de funcionar; lo que hace es exagerarlo a lo bestia. En este caso, debo reconocer que estoy dividido; por un lado no sorprende que estén en esta situación tras las medidas tomadas, pero por otro lado debo reconocer que no me esperaba la solución propuesta.
Técnicamente es un ajuste de 75.000 millones de euros, (relativicemos respecto a Grecia), pero en la práctica creo que lo entendemos mejor con una simple aplicación de la propiedad transitiva.
Partamos de la afirmación de Papandreus, (presidente Griego), de que “no se va a reestructurar deuda, sino que se va a reestructurar Grecia”. Esta frase la debemos entender pensando en que cuando se está usando la palabra reestructurar, nos estamos refiriendo a un proceso que básicamente consiste en eliminar, quitar, “pasar de”, o traspasar las pérdidas.
Está claro que Papandreus tiene que elegir entre tratar de eliminar deuda ahora o eliminar Grecia primero y deuda después. Lo curioso del caso es que los acreedores de los griegos cobraban una prima de riesgo que pagaban los que se van a comer el marrón.
En todo caso sólo voy a dar una lección, ¿sabe por qué se va a reestructurar la deuda?. ¡pues porque se niega!. El argumento es sencillo: ¿Sinde tendrá que salir a decir que a los bloggers no nos van a dar una retribución para comer?. Por mucho que le repita lo guapa que es; creo que me sorprendería un poco menos que saliese a desmentir esto de que “los actores de la ceja no van a percibir subvenciones”. ¡y la contundencia y las veces que nos lo tenga que repetir suele ser un indicativo de lo que ocurre en la realidad!.
En definitiva, que lo mismo que no veo a la banca desmintiendo que los trabajadores tengan unos grandes sueldos; si que he visto a ZP descartando nuevos ajustes; (¿adivinamos cual de los dos escenarios es más probable?). O dicho de otra forma, al final a lo largo del mundo hemos adoptado el modelo de libre mercado que no se nos ha ocurrido mejor que importarlo (y tunearlo) del último país comunista.