Tras los días de pánico de principios de semana, han tocado los días de estupidez en los que parece que no hay límites. De repente todo se acelera, y resulta que de alguna forma, los políticos no paran de sacar medidas, sin que seamos capaces de reaccionar, y por supuesto, sin que nadie tenga claro en que nos benefician, (por lo menos más allá de contentar a los mercados).
Desde el sector financiero, las declaraciones destacadas salen de la boca de Nin, (Ahora CEO de “la caixa”, que ya no es una caja). Básicamente lo que ha tratado es de convencernos de que aceptemos que el sector privado expolie la deuda pública bajo amenazas. Evidentemente soy consciente de que esto es una interpretación libre de lo que ha dicho, pero hemos de tener en cuenta que el también ha hecho lo mismo. Ya puestos a expresarse con total desprecio, supongo que al final lo que nos queda es tratar de determinar quien se acerca más a la realidad.
Lo que este señor pide es que no se deje caer la deuda pública de los países de la zona euro, ya que si esto ocurre Europa se convertirá “en el Far West”. “Si cae y nos vamos a otros valores como las materias primas esto será peor”. Por lo menos Ruiz Mateos, imploraba el “no nos dejen caer”, pero este señor, nos da unas cuantas pistas, y nos cuenta que la crisis se solucionaba, (la suya), en un fin de semana. En definitiva, le podemos dar las vueltas que queramos, pero lo que está pidiendo este señor es que el sector público, pague los desmanes de unas entidades, dándoles todo tipo de pelotazos, incluso superando el plan Francés para el rescate de Grecia, que no quiero dejar de recordar que no es otra gran estafa de los ciudadanos para salvar a la banca.
Lo de que “nos vamos a las materias primas”, la verdad es que llega tarde, pero nos da una solución a muchos problemas que ya había propuesto: ¡cerrar los mercados de materias primas a los inversores financieros!. Tan sencillo como esto. Evidentemente tenemos un problema, (no futuro, sino que este señor, se olvida del pasado reciente), con la especulación en las materias primas, y como tal no hay otra forma de evitar este problema que mantener lejos a los que los van a causar, ¡tal y como el mismo reconoce!.
Y por supuesto, la otra solución para salir de la situación es actuar en base a sus palabras, ¡nada de estado!, ¡nada de rescates! Y ¡nada de intervenciones!. La deuda griega tiene un valor en el mercado, y ese valor es el que los sacrosantos especuladores han fijado. ¡pues ya que no hay límites que tengan el valor de asumir las consecuencias de sus actos!.
Pero por supuesto, este señor, prefiere chantajear, porque tenemos a lo largo de todo el mundo toda una serie de gobiernos que no se han dado cuenta aún de que lo peor que podemos hacer es ceder a los chantajes, y que sin frenar en aceptar los chantajes, ahora se dedican a chantajear. En este caso en particular, dándoles lo que pidan en la deuda, lo que se conseguirá es que tengan más fondos para ir a las materias primas.
Pero los gobiernos, lejos de asumir que los chantajes nunca se aceptan porque a pesar de que el daño inicial sufrido siempre puede parecer malo, las consecuencias de aceptar siempre son peores, aceptan de una forma que sólo se puede calificar de vergonzosa.
En España, Elena Salgado ya ha salido en prensa a criticar a Alemania por criticar que la banca tenga que participar en los rescates, porque es una mala idea, de tal forma que parece que aquí discutimos entre el robo superlativo que propone Alemania y lo incalificable que es lo de España, (que es muy superior aún).
En Italia, tampoco han tardado absolutamente nada en ceder a la presión y han ido por el lado del Copago, (que en realidad es Repago, porque los contribuyentes ya pagamos la sanidad). Evidentemente es lo que nos queda en España, como ya he puesto en una recopilación de post acerca de este proceso; en el post titulado “ahora toca cargarse la sanidad”, y el copago no es más que el primer paso de un camino hacia la privatización. De esta forma, la sociedad tendrá un sistema de sanidad más caro, peor, `pero que generará unos negocios impresionantes para cuatro aprovechados para que nos sigan expoliando y a su vez generando ingresos para seguir en un circulo demencial. ¡A ver cuánto tardan en salir los análisis para decir que ya que los ciudadanos pagan porque no se asumen privatizaciones, y los informes sobre la elasticidad de demanda y todo esto!.
Pero desde luego el colmo del absurdo en las privatizaciones, (que no son otra cosa que una generación de negocios a cuenta de los ciudadanos de los distintos países que sufrirán unas pérdidas brutales), llega de Grecia donde nos cuentan que quieren privatizar la recaudación de impuestos, porque 14.000 contribuyentes, (se supone que están identificados, porque no se sabría cuantos son en caso contrario), deben 36.000 millones, (lo cual nos sale a más de dos millones de euros por contribuyente, y por tanto creo que no son ni pymes ni trabajadores), y no pagan.
La gran diferencia está en que en España esta cantidad simplemente no se debería, pero no deja de ser absurdo el caso Griego, que junto con Goldman están siendo protagonistas estrella de este blog y sobre todo de esta historia de vaqueros; En febrero de 2010, ya incluía a estos dos personajes en un post acerca de las tácticas, porque no dejaba de ser un poco ridículo que primero Goldman diseñase las mentiras de Grecia, luego lanzase los informes de que los datos estaban mal, para especular contra la deuda Griega. Pues ahora que resulta que colocan a una persona de confianza en el Banco Central Europea, lo más absurdo es que acabasen ocupándose de recaudar los impuestos. De esta forma, llegamos al fabuloso negocio para la banca de que se ocupan de defraudar, de ocultar y luego de la recaudación. ¿nos imaginamos a Botín recaudando impuestos?.
Ya por no hablar de que hace algún tiempo he tratado de exponer lo que ha ocurrido en España cuando se ha privatizado el servicio de vigilancia de la lucha contra el narcotráfico, y los resultados no han podido ser más desalentadores, (salvo para los que se forran a cuenta de perder servicio).
Lo que no acabo de entender es esta esquizofrenia de querer acabar con el estado al que se supone que están chantajeando para que les salven; porque lo increíble del caso es que el estado empieza a ser algo molesto para los ciudadanos, desde el punto y hora de que existen cuatrocientos mil expertos de medio pelo, que han confundido liberalismo con libertinaje y bajo el discurso del libre mercado, no salen de los despachos, pidiendo, exigiendo, chantajeando y reinvindicando.
Se me olvidaba, y aunque sea predicar en el desierto; ¿Qué se debe hacer ante un chantaje, una estafa, una mentira y un expolio sin precedentes?. Pues muy sencillo, y todo el mundo lo entiende de forma muy sencilla. Proteger lo máximo posible los daños que el chantajista nos pueda ocasionar, (regulación y prohibiciones a la especulación en sectores claves), y por supuesto no ceder. ¿Qué amenazan con lo que sea si no los rescatamos?. ¡Pues no se rescatan!. Así de simple.
Y por supuesto, empezar a sacar las cárceles para los evasores fiscales, (seguro que es mucho más efectivo que privatizar la recaudación de impuestos) y por supuesto para todo aquel que se salga de las normas y ocasione un mal a toda la situación como la que tenemos.