Esa frase lapidaria se remonta a hace poco menos de 2 años y la pronunció un tipo de 35 años, ingeniero industrial en una consultora multinacional y seguidor del Madrid habiendo nacido y vivido en Barcelona. Ese tipo era yo. No podía estar más equivocado (con la frase del título, no con ser del Madrid).
En 2019, un servidor ni dudaba que el dinero debía quedarse en el banco. ¿Para qué moverlo? Vale que ya no te dan el interés que te daban cuando abrí la cuenta allá por 2009 (un 4%!). De hecho no te dan nada. Pero dónde iba a meterlo si no? Virgencita, virgencita…
Lo que sí era (y soy) es un viciado de Twitter y ahí el algoritmo, no sé muy bien cómo aunque apuesto que en un parón FIFA, me puso algún tweet de algún inversor en Bolsa. En esos momentos, escuchar la palabra 'inversor' me daba una pereza máxima. Escuchar la palabra 'Bolsa' directamente hacía ponerme los pelos como escarpias. Quita, quita, el dinero en el banco, que he visto este mes que me han dado 3 o 4 céntimos por mis ahorros. Qué pringados estos del banco…
Pero a base de pensar en esos tweets sí me acabé dando cuenta que debía rentabilizar algo el dinero, al menos una partecita. Y así fue que, gracias a un compañero de trabajo y, sin embargo, amigo, decidí meter 400 euros en Bitcoin (flechita roja del gráfico).
Quedaría genial decir que me olvidé de ello y ahora me encuentro que mi dinero se ha multiplicado por 10.
La realidad es que fue comprarlo a 5.300 y bajar a unos 3.000 durante meses. Al llegar de nuevo a los 5.300, vendí todo con unas increíbles ganancias totales de 1,12€.
Me olvidé de mi compañero de trabajo y sus Bitcoins (nooooooooooooo) y llegó la época de las apuestas deportivas, una inversión que seguro me hubiera ido bien cuando veía deporte a punta pala… 10 años atrás. Ahora estaba en otra etapa, donde solo veía al Madrid y los últimos minutos de cada ridículo del Barça en Europa (gracias Leo por ‘irte’). Aquí empecé comiéndome todos los vendehumos posibles aunque rectifiqué a tiempo y acabé con unos 500€ de beneficios. Eso sí, también acabé muy estresado de seguir a gente experta pero que te obligaban a estar pegado al teléfono 24/7 para cazar una cuota antes de que se hundiera.
Necesitaba algo más tranquilo, donde tuviera seguridad en lo que hago (maldito bitcoin) y donde no necesitara de ningún consejero (malditas apuestas). Y así fue que me dio por leer el primer artículo sobre Bolsa. Google me había llevado hasta aquí, hasta Rankia, la mayor comunidad financiera en castellano. Pocas veces me habré alegrado tanto del funcionamiento del motor de búsqueda de Google.
Año y pico después aquí estoy, con un blog en la web donde empezó todo, con una estrategia en Bolsa que de momento es MUY ganadora (+68%) y con un riesgo bastante controlado (peor mes del -4%). No vengo a alardear de números (aunque ya que estamos…) porque ahora todo sube en la Bolsa y vendrán curvas cerradas como ya vinieron antes de que empezara con esto. Vengo a ir contando qué lecciones he aprendido en este tiempo y que seguro le serían de utilidad a mi yo de hace 2 años y a todo aquel que se esté planteando empezar a invertir (o a quién ni se lo haya planteado).
Así que vamos allá no? Welcome on board, Sergio de 2019 (y a quién se quiera unir)!