Uno de los últimos mail que he recibido dice lo siguiente:
Hola Tristán, creo que me he caído con todo el equipo. Hace dos meses participé en una subastas y me adjudiqué una vivienda. Todavía no me han dado la documentación de la subasta y me han dicho que suelen tardar unos cuatro meses, pero lo gordo es que ha llegado un oficio de un juzgado de lo mercantil declarando concurso de acreedores contra los bienes de la empresa que era propietaria de la casa subastada y ordenando que queden en suspenso todas las ejecuciones que se encontraran en trámites.
Lo peor de todo es que he hablado con el secretario del juzgado y veo que la cosa le ha pillado con el pie cambiado y que no tiene ni idea de que hacer. ¿Qué crees que pasará, qué puedo hacer yo, me devolverán el dinero o me darán el piso?
¿Te entregarán el piso o te devolverán el dinero? Es difícil saberlo porque habría que saber si el bien subastado era afecto a la actividad empresarial de esa sociedad quebrada, y otros varios detalles del procedimiento concursal que a mí se me escapan. No habría problema si ya se hubiera dictado el Decreto de Adjudicación, pero eso hubiera sido soñar despierto. De lo que estoy seguro es de que a menos que la compra hubiera sido el pelotazo del siglo, que no lo creo, lo que yo preferiría es que me devolviesen el dinero cuanto antes y, a ser posible, sin conflictividad judicial.
Porque a lo peor la parte actora se atrinchera para que no le incluyan su crédito en el concurso y el juez decide "sostenella y no enmedalla" y resulta que entre tirios y troyanos tu te quedas en medio y a verlas venir.