Siguiendo la misma argumentación, habría que decir que ahora bajan de precio porque la gente ya no los paga y, por lo tanto, porque no lo valen. Pero... ¿dónde está el suelo?
El de la vivienda es un mercado nada dinámico, motivo por el cual los periodos de contracción de los precios duran mucho y, a veces, ni siquiera se contraen, sino que son el transcurso de los años y el efecto "inflación" quienes hacen el trabajo de encontrar el equilibrio del mercado.
A ese respecto, el método más rápido y justo para encontrar en breve plazo el precio real de una vivienda es subastarla. La subasta, si es publicitada adecuadamente, es el método más eficaz para cruzar oferta con demanda y obtener así el precio real del bien en ese momento.
Así lo cree Pirineu 2000, la inmobiliaria de Berga que, para captar la atención de posibles clientes y de medios de comunicación, ha puesto en marcha una subasta inversa para vender una vivienda. El precio de salida el día 1 de julio fue de 150.000 euros y cada día que pasa se le descuentan 1.000 euros, de forma que el 27 de noviembre solo costará 1.000 euros.
Pero eso no ocurrirá porque mucho antes esta vivienda habrá encontrado su precio. Y yo me pregunto, ¿Sería posible que los particulares emplearan la misma fórmula para encontrar, de una vez por todas, el precio de sus casas?