Trump Media & Technology Group, la matriz de Truth Social, la plataforma impulsada por Donald Trump, registró pérdidas de 327,6 millones de dólares (301 millones de euros) en el primer trimestre de 2024, multiplicando así los 'números rojos' de 210.300 dólares (193.212 euros) contabilizados un año antes.
Asimismo, la facturación de la compañía entre enero y marzo apenas alcanzó los 770.500 dólares (708.905 millones de euros), una cifra que supone una caída del 31% respecto de los ingresos registrados en el primer trimestre del año pasado y que contrasta con los 6.600 millones de dólares (6.072 millones de euros) de capitalización bursátil de la compañía.
La compañía ha atribuido la mayor parte de sus pérdidas al impacto adverso de 311 millones de dólares (286 millones de euros) relacionado con la conversión de pagarés y la eliminación asociada de pasivos anteriores, inmediatamente antes del cierre de la fusión entre TMTG y DWAC el pasado 25 de marzo, previo a la cotización de Trump Media.
En cualquier caso, "TMTG cree que tiene suficiente capital de trabajo para financiar operaciones en el futuro previsible".
El consejero delegado de la firma, Devin Nunes, ha defendido que, una vez consumada la fusión se ha prescindido de la gran mayoría de los gastos relacionados con esta operación, "dejando a la compañía bien capitalizada".
"Nuestro capital de trabajo positivo nos permite explorar y llevar a cabo una amplia gama de iniciativas e innovaciones para construir la plataforma Truth Social, incluidas posibles fusiones y adquisiciones", ha añadido Nunes.
El informe trimestral y las cuentas de TMTG han sido revisados por la firma de auditoría Semple, Marchal & Cooper, después de que a principios de mayo la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC) acusara a la firma BF Borgers, anterior auditor de la empresa, y a su propietario, Benjamin Borgers, de un "fraude masivo".
Para resolver los cargos de la SEC, BF Borgers acordó pagar una multa civil de 12 millones de dólares (11,2 millones de euros) y Benjamin Borgers acordó pagar una multa de 2 millones de dólares (1,8 millones de euros), además de aceptar "suspensiones permanentes" de su actividad como auditores