Se ha incrementado la facturación en el 2S respecto al 1S, y se ha pasado a EBITDA positivo en el segundo semestre, reduciendose mas de un 90% en el computo anual.
En fin, todo podría ser mejor, evidentemente.
Pero teniendo en cuenta la travesía del desierto que ha pasado la empresa, estar a 31 de diciembre 2021 con los últimos 6 meses en cifras positivas de EBITDA, incrementar la cartera anual un 30%, y sobretodo disponer de tesoreria por encima de los 88 M €, es como para darse con un canto en los dientes.
Con estas cifras se puede ser optimistas para los próximos meses y por supuesto la empresa tiene margen para moverse en el cierre de los nuevos Contratos que llegarán en este 1S2022.