El aumento de los precios energéticos está pasando factura a las empresas y Vidrala, una compañía en la que cerca del 50% de sus costes corresponden a la energía, es buen ejemplo de ello. La compañía desciende un 32,5% desde los máximos históricos que marcó en julio de 2021 y Alfonso de Gregorio, director de inversiones de Finaccess Value, considera que es una opción atractiva a medio y largo plazo.
La industria del vidrio en Europa opera a unos niveles de utilización muy altos, la demanda es fuerte y los stocks son bajos por lo que el poder de negociación frente a clientes es razonablemente alto y debería permitir negociar precios al alza.
En un intento de recuperar los márgenes Vidrala ha incrementado los precios en el primer trimestre un 20%, una estrategia cuyos efectos podrían tardar en verse, según apuntan en Renta 4. Los expertos destacan además la política de dividendos. Con cargo a los resultados de 2021, Vidrala abonará 0,843 euros por acción, un 5% más que el año anterior. Como complemento en julio abonará 0,32 euros por título.