Abengoa ha actualizado sus proyecciones de negocio y contempla alcanzar una cifra de ingresos de alrededor de 2.500 millones de euros en 2020. Aunque la ingeniería andaluza estima que su actividad mejorará en los próximos años, se trata de un importe similar o incluso inferior al previsto para este ejercicio. Esto se explica por la salida de proyectos y negocios del perímetro del grupo.
Hace apenas dos meses, desde Abengoa se informó de que el grupo preveía registrar unas ventas de entre 2.500 y 3.000 millones de euros en el presente ejercicio, lo que implica un incremento de casi el 50% respecto a los 1.510 millones que ingresó en 2016. Entre enero y marzo, la compañía obtuvo una cifra de negocio de solo 336 millones. No obstante, según fuentes oficiales, la empresa mantiene su estimación para el final de 2017, lo que implicaría multiplicar por más de ocho este importe entre abril y diciembre.
La proyección de 2.500 millones para 2020 se ha realizado sin tener en consideración proyectos como el tercer tren México (A3T) o la participación del 41% que Abengoa ostenta en Atlantica Yield, cuya venta se espera para los próximos meses. De igual modo, la compañía contempla la venta de otros proyectos que tiene en marcha como el A4T y el ciclo combinado Norte III, ambos en México, las líneas de transmisión ATN3, en Perú, la cárcel de Punta de Rieles, en Uruguay, y otros contratos en Estados Unidos.
En los últimos meses, de hecho, Abengoa ya ha traspasado algunos proyectos, como la planta solar Atacama I, en Chile, que ha vendido a EIG -aunque mantiene la ejecución-, su mayor línea de transmisión en Estados Unidos o el 20% de la planta mexicana El Zapotillo, recientemente transmitido a Prana.
La nueva Abengoa se centrará en la actividad de ingeniería y construcción, abandonando progresivamente aquella vinculada al producto integrado, y siempre con la exigencia de la generación de caja. Se focalizará en cuatro verticales: energía, transmisiones, agua y mantenimiento. La compañía que preside Gonzalo Urquijo se ha fijado el objetivo de que al menos la mitad de su cartera de negocio la conformen contratos con un valor inferior a los 50 millones de euros. Con ello, pretende minimizar los riesgos de ejecución y evitar así repetir en el futuro los problemas de financiación que ha enfrentado en muchos de los proyectos adjudicados en los últimos años. Ésta es una de las premisas dadas por la compañía en una reciente reunión con la alta dirección para exponer la estrategia que ha diseñado Boston Consulting Group.
Duplicar la cartera
Al cierre del primer trimestre de 2017, la cartera del grupo ascendía a aproximadamente 2.400 millones. Hasta marzo, sumó contratos por unos 200 millones en Chile, Argentina, Reino Unido y Bélgica. En las últimas semanas ha logrado además nuevas adjudicaciones en Lituania o Chile.
Se trata de proyectos, en todos los casos, de un tamaño limitado, en línea con la estrategia de la compañía. Ahora bien, su interés también está en contratos de un volumen relevante. Como ejemplo, se halla en la fase final para la adjudicación de la cuarta fase del macrocomplejo solar Mohammed bin Rashid Al Maktoum, en Dubai, cuyo presupuesto se estima en alrededor de 400 millones de dólares (370 millones de euros).
La combinación de proyectos de menor tamaño con grandes contratos buscará, en cualquier caso, alcanzar una cartera de pedidos que prácticamente duplique el volumen actual, de forma que se sitúe en el entorno de los 5.000 millones. Es el nivel que necesitará con su nuevo perímetro para alcanzar los 2.500 millones de facturación pretendidos en 2020.
Por actividades, el área de energía supondrá en torno al 35% del negocio; líneas de transmisión tendrá un peso ligeramente inferior y agua y mantenimiento se repartirán el 30-40% restante.
En la estrategia de Abengoa, la dirección quiere implementar un nuevo modelo de organización que se enfocará en una orientación comercial en todos los estratos de la compañía, un mayor control en la ejecución de proyectos y una estructura más competitiva.
Bonus en acciones u opciones
Abengoa ha propuesto a la junta de accionistas del 29 de junio la aprobación de un plan de retribución variable plurianual entre 2017 y 2020 para Gonzalo Urquijo y 125 altos directivos. Una de las novedades es la posibilidad de que se articule mediante la entrega de acciones o de opciones sobre acciones.
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