El fabricante automovilístico Tesla ha registrado un accidente por cada 10 millones de kilómetros recorridos entre los conductores que utilizaban su tecnología de conducción semiautónoma Autopilot, mientras que entre aquellos que no lo emplearon la cifra se acortó hasta los 2,75 millones de kilómetros, según los datos del informe de seguridad de sus vehículos correspondientes al tercer trimestre de 2022.
En ese sentido, la compañía también ha señalado que en comparación con los datos más recientes disponibles de la Agencia para la Seguridad del Tráfico de Estados Unidos (Nhtsa) y de la Administración Federal de Carreteras (FHWA) del país norteamericano y correspondientes a 2021, en Estados Unidos hubo un accidente automovilístico aproximadamente cada millón de kilómetros.
"Creemos que la tecnología puede ayudar a mejorar la seguridad. Es por eso que los vehículos Tesla están diseñados para ser los más seguros del mundo. Creemos que la combinación de seguridad pasiva, activa y la asistencia automatizada al conductor son cruciales para mantener seguros a todos los conductores en la carretera", ha asegurado la compañía.
En esa línea, ha resaltado que los Model S, 3, X e Y han logrado "una de las probabilidades generales más bajas de lesiones de todos los vehículos jamás probados por el Programa de Evaluación de Vehículos Nuevos del Gobierno de Estados Unidos".
A su juicio, esto tiene que ver con la estructura rígida y reforzada del paquete de baterías que montan sus automóviles, lo cual produce que "rara vez" sufran daños graves en accidentes.
"En el caso extremadamente improbable de que ocurra un incendio, el diseño de última generación de nuestros paquetes de baterías garantiza que su sistema de seguridad funcione según lo previsto y aísla un incendio en áreas seleccionadas dentro de la batería, al mismo tiempo que expulsa el calor de la batería, la cabina de pasajeros y el vehículo", ha explicado la empresa.
La firma liderada por Elon Musk también ha señalado que para la elaboración de sus informes de seguridad recaba los datos de cada Tesla conectado para comprender las diferentes formas en que ocurren los accidentes y así desarrollar mejoras que en ocasiones puede realizarse mediante actualizaciones inalámbricas del software