Pianista, una posible respuesta a tus interesantes preguntas, de Encuentros de Expansión del pasado 12 de julio, con los responsables de TREA AM (Alfonso de Gregorio y Lola Jaquotot):
16. ¿Cual es su previsión para Acerinox a partir de la fuerte caída sufrida en los últimos meses?
12:40 Para dar una opinión de Acerinox hay que pararse primera a analizar en qué situación se encuentra el mercado de acero inoxidable sobre todo en función de la geografía en la que se desarrolla. A principios de 2018, EEUU introdujo aranceles del 25% a las importaciones de inoxidable, con lo que el material principalmente asiático que entraba en el país se dirigió a otros mercados, o sea a Europa. Esto ha llevado a precios que se han mantenido altos en EEUU, pero anormalmente bajos en Europa.
A mediados de 2018, la Comisión Europea introdujo medidas de salvaguarda temporales para el sector, limitando las importaciones. Sin embargo, la forma en que se aplicaron no resultó efectiva. A esto se le ha unido, que la situación macroeconómica ha ido ralentizándose, resultando en una demanda global menor de la esperada, agudizando los efectos vistos en Europa, y también llevando los precios del inoxidable en EEUU a cierta corrección, aunque todavía protegidos.
A principios de 2019, la Comisión Europea introdujo nuevas medidas de salvaguarda definitivas, que han llevado a una bajada substancial de las importaciones a Europa. Aun así, los precios en Europa no han recuperado, tanto por la situación de demanda como por la bajada del precio del níquel, que incentiva la liquidación de inventarios.
Creemos que a la que se produzca cierta recuperación de la demanda, la situación de inventarios es tal que se va a producir un episodio de compra para rellenar inventarios, con alta demanda aparente, que llevará a una normalización de precios en Europa.
Acerinox está expuesta principalmente a EEUU (47% de las ventas) y Europa (35%). En EEUU ha estado relativamente protegida, ya que sus centros de producción en el país implican que es el principal productor doméstico. Esto, junto con la expectativa de recuperación en los precios en Europa, debería normalizar plenamente los resultados de la empresa, lo que nos lleva a una expectativa de eventual recuperación de la cotización, aunque la visibilidad es reducida aún.
Por eso, esperaríamos a tomar posiciones en el valor a la presentación de resultados del segundo trimestre y al mensaje que dé la compañía para lo que queda de año. El riesgo de que la división europea lastre los resultados más de lo previsto (tal y como sucedió a finales del pasado año) está ganando enteros.