Mapfre es una acción lenta.
En noviembre rompió su máximo histórico de abril de 2007, máximo que superó holgadamente en enero de 2014, llegando a los 3,46. Ahora se encuentra digiriendo la última subida y no pasa nada mientras mantenga el mínimo de diciembre de 2,733.
Mapfre no es Jazztel ni Amadeus. A pesar de su tendencia alcista no suele marcar máximos crecientes y mínimos decrecientes seguidos en velas semanales. Sube tres o cuatro y baja tres o cuatro más, vuelve para arriba, vuelve para abajo. Marea la perdiz y barre con frecuencia los stop ceñidos, por culpa de ello son muchos los que entran y salen del valor, y se pierden la tendencia. En fin, que es difícil operar con ella atendiendo a parámetros semanales. En todo caso, de hacerlo, el stop estaría en los 2,9, pero es fácil que se los coma y vuelva para arriba.
La proyección de la acción es alcista y, si nada obliga a lo contrario, volverá a romper el nuevo máximo histórico de 3,46 más pronto que tarde. Aunque ya le digo, esta acción es para ponerle los stops e irse al bar con los amigos. Los que la miran cada día acaban saliendo de ella, porque emite señales en principio contradictorias y se hartan.
Un saludo.