Grupo Catalana Occidente (GCO) ganó 308,9 millones de euros el primer semestre, un 17,8% más que el mismo período del año pasado, según ha informado la aseguradora este jueves en un comunicado.
El resultado consolidado fue de 343,9 millones, un 19,8% más, mientras que el volumen de negocio subió un 11,4%, hasta los 3.224,6 millones, con crecimientos en sus tres segmentos: negocio tradicional, seguro de crédito y negocio funerario.
El negocio tradicional --que incluye Seguros Catalana Occidente, Plus Ultra Seguros, Seguros Bilbao y NorteHispana Seguros, que se fusionarán como Occident-- creció un 8,7% en volumen de negocio y alcanzó los 1.718,1 millones.
Sin embargo, el resultado ordinario se situó en 135,1 millones de euros, un 1,9% inferior al obtenido en el primer semestre de 2022, debido al incremento de 3,1 puntos porcentuales del ratio combinado del negocio de no vida, que se colocó en un 91,8%. El crecimiento de este ratio se debe, principalmente, al incremento del coste de los siniestros por los efectos inflacionarios, básicamente en los ramos de automóviles y multirriesgos.
En seguro de crédito --que aglutina a Atradius Crédito y Caución, y Atradius Re-- el resultado ordinario aumentó un 43,6%, hasta los 211,9 millones de euros. Asimismo, el volumen de negocio (primas facturadas más ingresos por información) se incrementó un 7,8% y alcanzó los 1.399,2 millones de euros.
En cuanto al ratio combinado bruto de reaseguro, este se situó en 71,4%, 2,7 puntos porcentuales por debajo del ratio del primer semestre del ejercicio anterior. GCO explica que la entrada de siniestros en este negocio siguió manteniéndose por debajo del nivel pre-pandemia, aunque ha mantenido la prudencia en el nivel de provisiones de años anteriores.
En cuanto al negocio funerario --que incorpora los datos de Asistea y de Mémora desde el 9 de febrero--, registra un volumen de negocio de 107,3 millones y un resultado ordinario de 8 millones.
Los recursos permanentes a valor de mercado durante los seis primeros meses del año aumentaron un 8,3% respecto al cierre de 2022 hasta los 5.322,3 millones de euros, debido principalmente a los ajustes de valoración. Por otra parte, los fondos administrados se situaron en 15.111,6 millones de euros, un 0,8% más.
RENUNCIA DE LAS FUNCIONES EJECUTIVAS
Por otro lado, el grupo asegurador ha informado de que el consejo de administración ha aceptado la renuncia voluntaria del presidente, José María Serra, a las funciones ejecutivas, con efectos desde el 31 de julio.
Serra seguirá como presidente del consejo de administración y de la junta general de accionistas de la sociedad, con carácter de no ejecutivo y en calidad de consejero dominical.
De esta manera, GCO separa las funciones ejecutivas y no ejecutivas en su gobierno corporativo. Así, el grupo asegurador señala que contará con un presidente no ejecutivo, "una figura que se caracteriza por su visión estratégica y cuya misión se centra en presidir el consejo de administración, liderar el debate en su seno y velar por los intereses de los accionistas a largo plazo".
GCO recuerda que aplica la "práctica totalidad" de recomendaciones del Código de Buen Gobierno de las Sociedades Cotizadas de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), así como prácticas avanzadas en materia de gobierno corporativo
