Tienes razón y no tienes razón. Me explico: Efectivamente el NAV de ayer era cercano a 12, pero por lo que yo he dicho... pq no les dió tiempo, no quisieron o no pudieron realizar las coberturas que diariamente deberían hacer a final de mercado. Si lo hubieran hecho como lo tenían que hacer estaría en 5.3 aproximadamente.
Date cuenta de que el 2/2 el NAV del SVXY fue de 103,73 y el 5/2 los futuros del VIX sobre los que se calcula el SVXY bajaron un 96,1%. Esa bajada, da un NAV de 4$ el 5/2, como además se puede comprobar en la hoja de cálculo que te puedes descargar de la página que me has enviado de PROSHARES. ¿Cómo es posible que al día siguiente el NAV fuera de 11,37? Es matemáticamente imposible una subida del 187% en un sólo día del SVXY (todos esos datos están sacados de la excel que te puedes descargar en proshares). Cómo eso era matématicamente imposible y algo no cuadra, le pregunté a Vance (https://sixfigureinvesting.com/blog/) que había pasado y la explicación que me ha dado, fue la que yo dije:
Hi Fernando,
What happened is that ProShares did not reblance at close at 5-Feb-2018 as it normally does. Rather than follow the standard algorithm which calls for buying at the settlement price they either prebought or delayed buying VIX futures to cover the appropriate amount of VIX futures (hundreds of millions of dollars worth in this case). The price of VIX futures had a massive run-up culminating at the final settlement around 4:15ET on the 5th. By not trading at the settlement price ProShares partially covered its short positions in SVXY at a significantly lower cost than the settlement price.Since SVXY is an ETF its net asset value is determined by the value of its assets this cost savings is reflected in its IV price. Now that we are back to more normal situations I expect SVXY to go back to closely tracking the opposite of VXX's percentage moves.
De todas formas, lo importante es que ahora ya se sabe cual es el valor teórico y que parece que por fin hoy se están moviendo tanto VXX como SVXY de forma normal. A partir de ahora... que Dios reparta suerte!