El comportamiento del pequeño inversor en Bolsa puede determinar su rentabilidad
Nuestro comportamiento como inversor, nuestra forma de tomar las decisiones, impacta de forma directa en nuestros resultados en Bolsa. Es cierto que no existe una única forma de ganar de manera consistente en los mercados, pero lo cierto es que hay ciertos comportamientos que nos harán tenerlo mucho mas complicado. En ese sentido los estudios sobre Behavioural Finance, nos dan muchas pistas sobre que tipo de conductas debemos tratar de corregir a la hora de invertir. Sin embargo pocos de ellos realmente aportan datos estadísticos reales. Un estudio de una Universidad, realizado por Arvid O. I. Hoffmann, Hersh CEFRIN y Joost M. E. Pennings aporta un poco de luz sobre esta tema y extrae conclusiones muy interesantes que pueden ayudar al pequeño inversor a elegir la forma mas sencilla de encontrar la rentabilidad. Con una muestra de más de 5.500 inversores y con acceso a la rentabilidad de sus carteras, el estudio obtiene conclusiones realmente interesantes. Las conclusiones más importantes se reflejan en dos gráficos. El primero representa la rentabilidad de un inversor en media mensualmente en función de su principal objetivo a la hora de invertir.
La primera conclusión es que si nuestro principal objetivo es especular en el mercado o invertimos como un hobby, nuestra rentabilidad en media será peor que si nuestro objetivo está más en el largo plazo, en el ahorro para la jubilación o el incremento de nuestro patrimonio. En media la gente más joven suele decantarse por acudir al mercado para especular, con una operativa mucho más frecuente y la mayor rotación de la cartera. Los inversores con menor rotación de cartera son los que buscan construir un ahorro para la jubilación. Los inversores dedicados a incrementar su patrimonio son los que cuentan con unas carteras con un mayor capital, mientras que lo que afrontan la bolsa como un entretenimiento son los que menor dinero mantienen. Otro dato interesante del estudio afirma que la confianza afecta en mayor medida a los hombres lo que les lleva a sobre operar teniendo unos peores resultados que las mujeres. Una de las preguntas más interesantes que responde el estudio es respecto a las estadísticas de los resultados dependiendo de la estrategia que siga el inversor en su operativa. Este gráfico recoge la rentabilidad media del inversor mensualmente en función de la estrategia que sigue. Los datos vienen a demostrar que una aproximación fundamental tendrá una mayor rentabilidad para el pequeño inversor frente a una aproximación más técnica. Incluso una aproximación basada en la intuición funciona mejor que una aproximación fundamental. ¿Funciona la intuición? Pues el estudio comenta que la intuición acompañada por el seguimiento de las noticias financieras es la mejor opción. Un extraño resultado, pero que podría explicarse si pensamos que probablemente el inversor tenga intuiciones en su ámbito de conocimiento profesional. Del estudio se puede sacar la siguiente conclusión conclusión, el pequeño inversor debería aproximarse a la bolsa con una visión de largo plazo, con una pequeña rotación de la cartera y con una aproximación basada en su conocimiento profesional (intuiciones) o en análisis fundamental. Mi experiencia personal concuerda con las conclusiones del estudio. Es relativamente fácil encontrar personas con rentabilidades positivas en bolsa, en inversores de largo plazo y con poco movimiento de carteras. El corto plazo es un entorno mucho más complejo y el análisis técnico ofrece una falsa sensación de control para un inversor novato, dado que es una técnica que requiere de una amplia experiencia para poder encontrar rentabilidades positivas. Los profesionales que he conocido con rentabilidades positivas en análisis técnico son personas con amplia experiencia en mercados Jesús Pérez Sánchez Bolsa.com