Hace un año cuando salía la noticia de la venta a IFM del negocio concesionario de OHL, alertaba de que, aunque a primera vista la operación resultará interesante pues permitía cancelar buena parte de la deuda que ahogaba a la compañía, se estaba vendiendo la única de las divisiones de negocio que tenía beneficios.
Contradictorio resultaba entonces que la mayoría de gestores value con fondos ibéricos en España apostará una parte de su capital en la compañía, asumiendo que a los precios que cotizaba eran inferiores a los ingresos y casi todos los analistas de estas gestoras defendían que como mínimo la acción debía cotizar a 5€.
Pues ayer la compañía presentó los resultados trimestrales destacando la pérdida de 843 millones en el período como se puede observar en la siguiente imagen
La compañía atribuye este mal resultado a un descenso del 9% en las ventas por la disminución de actividad de su negocio de construcción y a extraordinarios según los cuales la pérdida comparable sería de 117 millones.
Entre los extraordinarios destacan pérdidas judiciales, coberturas fallidas con divisas y pérdidas en las ventas de las filiales.
Por la parte positiva se podría destacar que la cartera de construcción cubre 26,6 meses y asciende a 5582,1 millones. La posición de liquidez de la compañía asciende a 1326,9 millones.
La cotización de la compañía se encuentra en mínimos históricos
Y aquí pueden encontrar los fondos que la tenían en cartera al final del segundo trimestre
La compañía capitaliza a 600 millones casi la misma cantidad que la caja neta con recurso.
¿Es hora de Deep Value con OHL?