Sobre el tema de la participación de Ericsson en el capital de Ezentis y la posible entrada de un “inversor cualificado” que adquiriese ese paquete de títulos a Ericsson, hay que hacer un poco de historia. Aunque inicialmente se habló de un precio de 29,5 millones, la filial de Ericsson (Excellence Field Factory (EFF)) fue adquirida por Ezentis en junio de 2018 por 26,5 millones, de los cuales 7 se pagaron al contado y los otros 19,5 mediante una emisión de 31,915 millones de acciones nuevas, por lo que cada acción de Ezentis se valoró en 0,61 euros (19,5/31,915). Mediante la colocación a un “inversor cualificado” de ese paquete de acciones (31,915 millones) a los precios actuales (0,40 euros/título) Ericsson ingresaría 12,77 millones, es decir perdería 6,73 millones de euros (un 34,5%), de tal forma que la venta de EFF le reportaría “solamente” 7+12,77=19,77 millones, lo cual es para pensárselo.
La dirección de Ezentis lleva un año buscando un inversor institucional que adquiera ese paquete de acciones de Ericsson, pero no lo encuentran por un tema de precios. La caída del valor del título podría estar relacionada y propiciada por ese hecho de la valoración de la acción . El “inversor institucional cualificado” podría ser cualquiera (se habla de una empresa apadrinada por Berenberg (*), que siempre ha recomendado la inversión en Ezentis y la acompañó a un “road show” por Alemania), que hubiese decidido comprar las acciones de Ericsson, pero a su valor nominal (0,30 euros/título).
Esta teoría de la valoración coyuntural de esa transacción a 0,30, (o a un precio cercano) tiene visos de ser verdad por las dos circunstancias siguientes:
1.- El incremento de posiciones cortas en el valor de JP Morgan. Este banco se conoce muy bien a Ezentis y sus interioridades, por el préstamo que negoció con el Grupo su filial Highbridge. Y si JP Morgan apuesta a la baja es porque sabe que la colocación del paquete de Ericsson se realizará a precios por debajo de los actuales.
2.- La propia Ezentis está interesada en que el paquete cambie de manos para tener un accionista de referencia que diseñe un Plan Estratégico convenientemente consensuado. Para ello (aparte de los “road shows”, que ya llevan unos cuantos) los directivos contemplan pasivamente la bajada coyuntural del precio de la acción con excusas varias: la suspensión de pagos en Argentina, las devaluaciones de las divisas latinoamericanas, la renegociación de la deuda corporativa, el “riesgo de precio”, los problemas del sector teleco, el entorno político y económico, la inestabilidad de los mercados, la adecuación estratégica, etc.
Los analistas no tienen la percepción de que los resultados que va obteniendo Ezentis sean sólidos, de ahí la volatilidad del valor y que cualquier “inversor institucional cualificado” tienda a cubrirse las espaldas e invertir en Ezentis solo al valor nominal de sus títulos.
Tasando la acción de Ezentis a 0,30 euros, el paquete de Ericsson estaría valorado en 9,57 millones por lo que Ericsson habría ingresado “solo” 7+9,57=16,57 millones de euros, (perdería 10 millones (26,5 - 16,57) sobre el precio inicialmente estipulado) lo que tampoco estaría nada mal dado que Ezentis tuvo que incorporar a su plantilla a los 750 trabajadores de EFF, (antes EFF tenía la mitad), cuando EFF estaba finalizando contratos importantes preveyéndose un exceso de plantilla, que es lo que hay ahora. Ericsson se cansó de echar gente a la calle (por las continuas huelgas) y le endosó la papeleta a Ezentis, traspasando a EFF unos 340 trabajadores.
El desenlace de esta situación podría producirse a finales de febrero del 2020 tras la presentación anual de cuentas. Muy probablemente Ericsson acabe transigiendo y acceda a vender su participación en Ezentis a precios entre 0,30 y 035. En mi opinión cuando este tema del “paquete de Ericsson” se haya resuelto favorablemente y siempre que las provisiones a realizar por lo de Argentina no sean muchas, el título ha de progresar favorablemente porque a pesar de la deuda, la empresa es viable.