Desesperación total en el sector financiero español
http://www.cincodias.com/articulo/mercados/gran-banca-compromete-arropar-bankia-logra-cubrir-tramo-institucional/20110704cdscdsmer_1/
Ángeles Gonzalo - Madrid - 04/07/2011
La gran banca ha colocado a Bankia una red para su salida a Bolsa. Santander, BBVA, Popular y previsiblemente La Caixa, están dispuestos a invertir en la compra de títulos del grupo que preside Rodrigo Rato en el tramo institucional si al final no logra completar el objetivo de colocar el 40% de sus acciones entre este grupo de inversores.
El Gobierno ha puesto todo su empeño para que Bankia salga a Bolsa pese a la complicada situación de los mercados que provocó que la prima de riesgo española se situara en los niveles más altos desde la entrada del euro al rozar los 286 puntos básicos el pasado 24 de junio. Este negro panorama aconsejaba retrasar la colocación de Bankia. No así su tamaño. El grupo financiero encabezado por Caja Madrid y Bancaja puede poner en jaque a todo el sector bancario e incluso al país si fracasa en su proyecto. Bankia es una entidad considerada de riesgo sistémico, por lo que cualquier decisión contraria a la opinión de los mercados puede llevar consigo consecuencias nefastas.
"Un paso en falso como el anuncio de un posible retraso en su colocación podía ser visto por los analistas peor incluso que un fracaso en su salida", coinciden varios expertos. Ante ello, Gobierno, Banco de España y la propia entidad estaban de acuerdo en que no se podía dar marcha atrás.
Bankia contaba ya con un salvavidas. Los sondeos que ha realizado en sus 3.801 oficinas confirma que la colocación del tramo destinado a minoristas, el más ambicioso al representar el 60% del total, está asegurado.
Tramo institucional
No sucede lo mismo con el tramo institucional, que inicialmente iba a representar el 50% y tras las dudas generadas por algunos potenciales inversores se ha reducido al 40%. Ante ello, la ministra de Economía, Elena Salgado, pidió la ayuda de la gran banca para que apoyara la operación. Y lo consiguió. Santander, BBVA y Popular, que participan en la colocación en el tramo minorista en el caso del tercero, y en el institucional en el del primero y segundo, se han comprometido a suscribir hasta el 50% del tramo institucional, que alcanza unos 1.600 millones de euros (dependiendo del precio final que alcancen los títulos de Bankia) si no se cubre este tramo.
Salgado también solicitó el apoyo de La Caixa, pero el grupo que preside Isidro Fainé no ha comunicado su decisión final. El viernes, de hecho, cuando Caixabank inició su cotización, Fainé aseguró medio en broma a la prensa que podría invertir en Bankia cuando salga al Bolsa el próximo 20 de julio.
Una vez arrancado el compromiso de la gran banca para que invierta unos 800 millones de euros en acciones de Bankia y comprobar en un sondeo en las oficinas que la colocación del tramo minorista estaba casi asegurado fue cuando el consejo de este grupo aprobó por unanimidad su salida a Bolsa, una decisión arriesgada si se tiene en cuenta que fue un día después cuando Grecia dio el sí al plan de la UE para recibir más ayudas, lo que ha calmado algo los mercados.
Varias fuentes aseguran que puede que al final no sea necesario que estas entidades tengan que adquirir títulos del grupo liderado por Caja Madrid. El viernes aseguraban que se había detectado un alto interés de potenciales inversores institucionales para suscribir acciones en el road show.
El precio con el que parece que finalmente saldrá a Bolsa Bankia se ha convertido en un buen aliciente para estos inversores institucionales. Prácticamente todos los analistas aseguran que Bankia es una buena inversión siempre que su previo de salida se encuentre en el rango más bajo, es decir, que el descuento supere el 50% de su valor contable tras la ampliación. La horquilla que maneja el grupo es de un precio por título de entre 4,41 euros y 5,05 euros.
Pruebas de estrés
Otro acicate que apremia a Bankia para salir a Bolsa es que tras las pruebas de estrés que se publicarán en las próximas semanas, se espera que un gran número de entidades financieras europeas necesiten recapitalizarse y por lo tanto el reclamo de inversores será mucho mayor