¡Buenos y felices días!
Hace un día muy ventoso y no es que con el viento no se oiga, que quizá no se oye, pero lo que no impide con seguridad es la lectura. ¡Bendito regalo que nos hacen algunos literatos! Otros más que regalo, parece que nos persigan para castigarnos por algo malo que hicimos, si no en esta, en otra vida...
Lo siguiente obviamente no será mío, pero me gusta y me recuerda el efecto del viento...
El viento es un caballo:
óyelo cómo corre
por el mar, por el cielo.
Quiere llevarme: escucha
cómo recorre el mundo
para llevarme lejos.
Escóndeme en tus brazos
por esta noche sola,
mientras la lluvia rompe
contra el mar y la tierra
su boca innumerable.
Escucha como el viento
me llama galopando
para llevarme lejos.
Con tu frente en mi frente,
con tu boca en mi boca,
atados nuestros cuerpos
al amor que nos quema,
deja que el viento pase
sin que pueda llevarme.
Deja que el viento corra
coronado de espuma,
que me llame y me busque
galopando en la sombra,
mientras yo, sumergido
bajo tus grandes ojos,
por esta noche sola
descansaré, amor mío.
Lee todo en: El viento en la isla - Poemas de Pablo Neruda http://www.poemas-del-alma.com/el-viento-en-la-isla.htm#ixzz3zTpl2mqv
Viene a colación, sí, en mi mente por lo menos. Tu caballo galopante no me lleva, no me convence. Tus argumentos no necesitan tanta suposición: Pongamos que hablo de Madrid...
Te lo dije, y como soy de ideas fijas, lo mantengo, que la legalidad de la ley es arbitraria, luego no es un concepto absoluto, ni puede serlo. Y lo que es peor, la aplicación de esa ley "legal" también es tristemente arbitraria y por tanto, no siempre justa, porque depende de parámetros humanos, de la capacidad humana de legislar y de aplicarla con rectitud de conciencia.
Bien, dicho esto. Si una mayoría bien pensante considera que una (muchas, todas) ley no es justa, ni se aplica ecuánimemente, lo único que resta es derogarla, cambiarla, sustituirla por otra.
No me sirve el aplicar MI justicia particular y en la medida que a mi me dé la gana.
¿Es acaso justo que tú te puedas comprar un piso enorme y carísimo y yo no?
¡¡Pero si a ti no te hace falta tantos metros cuadrados y yo tengo marido, cuatro hijos, dos perros y una abuela a mi cargo!!
Aplicando tu lógica y legal ley, yo no podría ocupar alguno de los metritos cuadrados que te sobran y a mí me faltan, PERO aplicando MI ley, que es mucho más lícita que la tuya, más lógica, vamos de cajón de madera de pino, si tú tienes DOS y yo CERO, la justicia divina lo resolverá, porque es mucho más normal que los dos tengamos UNO cada uno y todos tan felices... Así que por la fuerza, te lanzo gases lacrimógenos por la ventana, te hago salir y luego ocupo tu casa con una máscara...
Me encanta la idea.
Es maravilloso pensar que esa justicia divina que tanto te mola, permita y conste en lanzar un cóctel molotov en la oficina dónde un hijo de la gran puta estafó a mi padre y le hizo perder la inmensa mayoría de sus ahorros. Despavoridos, los trabajadores del banco, sí el hijo de la gran puta, también, saldrán corriendo y a punta de pistola, o de lo que encuentre más a mano, entraré y saquearé las cajas, hasta recuperar lo que era de mi padre -y por justa herencia- ahora tendría que ser mío.
Me enloquece de alegría pensar que todo va a ser igual para todos y que si yo tengo una casa grande y tú una pequeña, yo pague un patrimonio por mi casa y tú por la tuya... Nunca entenderé por qué a algunos se les hace pagar veces y veces y más veces en su vida, por cosas que NO producen ganancia alguna, sino todo lo contrario, gastos y más gastos de mantenimiento, cuotas de comunidad de propietarios, facturas de luz, agua, gas, teléfono, ibi, transmisiones patrimoniales cuando la compras, plusvalías cuando la vendes, y hasta cuando la heredas, también tienes que aflojar la mosca por tener algo que es tuyo, porque tus padres lo ahorraron/cuidaron para tí.
Sin embargo, a otros, privilegiados de la vida, el tener casa, coche, muchas veces en plural, por no haber ahorrado un puñetero duro en su vida y vivir de hipotecas, créditos y demás "pagarés", no tienen el enorme honor de contribuir a las ayudas sociales, a base de impuesto del patrimonio.
Como me parece injusto, voy a ir preparando unas cuantas piedras gordas y una honda... para ir lanzando en la cabeza a todo aquél que considere más privilegiado que yo.
Vale, no les gustará a muchos, pero a mi MI ley, me encanta y como la aplico yo, pues miel sobre hojuelas, hago lo que me da la gana y todos os calláis.
Pues no, Mua, un tío que en una asamblea anima a los presentes a ir aprendiendo a fabricar cócteles molotov, para ir lanzando a no sé quién, con la excusa de vencer al "cruel capitalismo", cuando realmente lo único que está deseando es formar parte del mismo, pertenecer al bipartidismo, siempre y cuando su partido sea uno de los dos, y constituir un estado federal de naciones independientes, dónde cada uno haga la ley a su medida, no es de mi agrado, ni lo será nunca.
No puedo entender y tampoco me has convencido con tus suposiciones múltiples, que a otros, por reunirse para animarse A LO MISMO, se les acusara de enaltecimiento del terrorismo. Ellos pedían otra cosa, bueno, pedir, he he he, exigían otra cosa, pero me da igual la motivación de cada uno, porque todos y cada uno de nosotros podemos tener diferentes razones, motivos para agarrar un cuchillo y salir a la calle de "cacería" (sic).
A ellos les molestan los guardias civiles y en general, las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado... y les aplaudes que animen a zurrarles la badana en cuanto los vean. Bien, por la misma regla de tres, a mi me molestan ellos y convendrás conmigo que tengo el mismo derecho innato que ellos a salir con mi kalashnikov y reducirles a cenizas.
Así, animando al personal, fue como empezó en mi tierra un movimiento de guerra en plena paz, un movimiento dictatorial que se desarrolló en plena democracia, sin sentido, sin razón, porque NO EXISTE un motivo para matar por imponer tus ideas, por muy razonables que estas te parezcan, porque vivimos en sociedad y si no te gusta, te subes al monte y te quedas a vivir allí con los zorros; porque hay unas reglas del juego democrático y matar, incendiar, destrozar en base a un supuesto y muy presunto derecho de imponer tu voluntad es una locura, una barbaridad, una sinvergüencería y muchas otras características que no me apetecen escribir aquí.
Si al lanzar un cóctel molotov de esos que con tanta alegría promulga tu amigo, matas a alguien, serás un asesino. Quien lo jalea, lo anima, lo tiene en mente, lo gestiona y/o lo usa, es un asesino en potencia.
Sí, sé que ahora me dirás que cualquier ser humano es un asesino en potencia. Ya. Pero hay personas que tenemos una conciencia bien formada y otros, a la vista está, más bien deformada, probablemente por su envidia, su odio y su poco respeto por la vida de los demás.
Un abrazo que ha sufrido la guerra cuando los demás españoles vivían en paz. Y como sabe lo que es, no da su brazo a torcer por filosofías de barrio politólogo, ansioso de poder, de dinero y de clasismo.
¡Sed muy felices!