La primera vez que comí "mamellas" (o como se escriba) las compré en el convento de monjas de Orihuela, creo recordar que eran Trinitarias o Dominicas... Pero hoy en día las auténticas se venden en una pastelería de Torrevieja y en el horno Carmen de Santa Pola. En Elche se vendían antes cerca de la Glorieta, pero ahora ya no las he vuelto a ver. Es que los ilicitanos son muy pudorosos, jajajaja
La receta, que obviamente he comprado para imitar en casa, lleva una oblea en la base, sobre la que se añade un trocito de bizcocho borrachito de almíbar, sobre el que se coloca un poco de yema de huevo almibarada. Se hace un merengue casero con clara de huevo batida a punto de nieve con azúcar y se coloca encima en forma de seno. Se introduce al horno muy caliente, para que dore el "pezón" y rápidamente se baja a 150º para que se haga el merengue por dentro. No más de 5 minutos, bueno depende del tamaño del busto, pero cuaja de una manera obvia.
¡Delicioso!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.