Hola indi, guapa. Me ha dado una alegría enorme de encontrarte de nuevo.
Estos días me he acordado mucho de tí porque me enviaron la carta de Anabel, su valentía y el llamar a los asesinos por su nombre me han conmocionado, a la vez que me he entristecido por la impotencia que entra al ver que no podemos hacer nada y saber que un hombre en sus circunstancias muera y los responsables ni se alteran.
Dale mucha fuerza a tu padre (aunque sé que la tiene) para que se cuide y pueda ver a muchos pagando lo que han hecho.
Del trabajo, ni te cuento, cada día nos encontramos con más injusticias.
La reforma va, con problemas nimios pero agobiantes. Espero salir airosa por lo menos de esto porque parece que me ha mirado un tuerto, con perdón al tuerto.
Besazos y espero estar pronto más tiempo