Me voy a Lisboa

hola, estoy atacando a la flota rusa eristoff, karli el martes te puedo acompañar, mañana te llamo, saludos familia

Buenas noches peña lisboeta
Karli, que me vas a sacar los colores

Por cierto si todo va bien este mes sacaré lo último que me quedaba en el SAN (un fondo garantizado estructurado de esos, ya no compro basura de esa, claro)

Efectivamente. Salvo error:
CNMV: preferentes, findos de inversión, acciones, bonos, obligaciones, convertibles ...
DG Seguros: seguros (aunque no lo parezcan, como el DyV), planes de pensiones
Banco de España: depósitos, cuentas, etc

Chica, me has hecho sentirme inhumana, jajaja,
¿De verdad consideras que la Humanidad tiende a evadirse? ¡Pues que mierda de Humanidad!

Porque a mí mis padres me enseñaron a todo lo contrario, a afrontar los problemas, a luchar contra la injusticia social con las armas que la legalidad pone a nuestro alcance -aunque a veces parecen quedarse cortas-, a plantearme que con las dificultades hay que crecerse y que los reveses que nos depara el destino nos hacen fuertes, a tirar del carro con alegría y mira que ésto cuesta muchísimo. Y solo el que se enfrenta y pelea puede ganar la batalla.
Quien se evade y "se coloca como sea" ya ha perdido.

Me parece de poca humanidad y de bastante cobardía buscar en el "colocarse" una solución o la panacea al tedio, al aburrimiento, (y más aún a los problemas). Es más bien desidia de no querer buscar nuevas formas de diversión que no pasen por el aborregamiento colectivo al que conducen alcoholismo y drogadicción. Pero desgraciadamente el consumo de sustancias es cada vez más permisivo, lo que hace creer a los jóvenes que no sucede nada si se consume. Y nos olvidamos que el abuso en el consumo de alcohol no es alcoholismo, pero se le aproxima peligrosamente, cuando hablamos de adolescentes, como era el caso de mi anterior post.

Cuando afirmo que el botellón es una "lacra" de la juventud, me refiero a la acepción de "defecto o vicio", porque considero -es una opinión y, por lo tanto, cuestionable-, que el necesitar beber, beber de una botella de dos litros a morro toda la noche, beber hasta vomitar si se tercia y encontrarlo divertido e incluso placentero, y repetirlo cada fin de semana porque sin estado de embriaguez no se encuentre la felicidad, porque resulta lo mejor que se puede hacer, en ocasiones lo único que se te puede ocurrir, me parece como poco calificable de vicio.
Y desde luego algo está fallando en esa juventud, que con toda la vida por delante, con salud, energía y vitalidad solo se les ocurre beber y beber. Y si algo falla es porque hay un defecto. Para mí un craso defecto que surge de una mal entendida educación demasiado tolerante, en la que un NO paternal constituye un aniquilamiento de las libertades y los derechos del joven hijo, que goza de un libertinaje absoluto donde la responsabilidad se olvida.

De ahí, pues, mi comentario: El botellón es una lacra de la juventud -que lo practique-.

Y que conste que no tengo nada en contra del juego infantil del MOLINILLO, que favorece el equilibrio y la tensión muscular.
Edad: a partír de 4 años.
Objetivo: divertirse dando vueltas sin marearse.
Los niños y niñas se cogen de las manos por parejas. Deben estar cogidos fuertemente para no soltarse. Juntan las puntas de los pies y tensan los brazos, Entonces empiezan a dar vueltas cada vez más rápido. Juegan hasta que se cansan o se marean.

Ahora, libre es quien piense que el botellón se puede comparar a un infantil jueguecito. Personalmente me quedo con el parchís.

Un saludo

Holaaaaa, ¿qué tal estás? Oye ¿por qué te voy a sacar los colores?
Ah, vale porque te he llamado guapetón, ¿no?
Bueno es que eres muy majete y un encanto de persona, y además lo sabes de sobra...

Gracias, gracias, gracias, gracias, gracias, gracias, gracias... NO te lo creerás, pero he rezado a la Virgen de la Asunción para que pudieras sacar un minutito. ¡Gracias!
Ni te imaginas qué alegría me acabas de dar. ¡Ojalá puedas venir!
Un saludo

Sí, sí, esta tarde he estado leyendo todo el puñetero contrato con anexos de condiciones y el de condiciones especiales. Y efectivamente para reclamar cualquier cosa hay que acudir al DGS.
A mí que me permitan rescatar y fuera todo, todo y todo como dicen los de la Catalana Occidente.