Bueno, de ahorradora nata (la dieta el martes) a ahorrador nato (sin puntitos entre las letras, ;-) ):
Hombre, ponerse, ponerse, lo que se dice ponerse. Hay muchísimos factores que afectan a la capacidad ahorradora de una familia. No es lo mismo estar soltero -y entero o a trozos-, tener un sueldazo, vivir en casa de los papis con todos los gastos "necesarios" pagados y ahorrar un pastizal, que estar casado, tener cuatro hijos, solo un sueldo medio, que viene y va como los guadianas, cobrar cuando el jefe quiere, y no tener ningún tipo de ayuda familiar...
En primer lugar habría que educar en el ahorro, cosa que muchos parece que adolezcan de una falta de mentalidad. Hay que querer. Dicen que querer es poder, vale, a veces...
De niña tenía una hucha, mi hermano otra. Cobrábamos la misma "paga" y mi hucha era la única que siempre estaba llena... Así que viene el segundo factor después de recibir la misma educación. El espíritu ahorrativo personal de cada cuál y cada cuála.
Y, por supuesto, como comentábamos, el poder, porque si no hay entradas, no habrá salidas, pero fijo que sembrar sin semillas va a estar fastidiado...
Mi comentario se refería a que ahorrar 100.000 euros con un sueldo de 500€ hoy en día, más que plausible y posible, es un milagro.
Y lo mantengo, claro, buena soy yo, jajaaa
Sin duda tacita a tacita se van consiguiendo las metas en la vida. Hasta ahí estoy de acuerdo, pero también tenemos que ser lo suficientemente conscientes como para saber plantearnos metas factibles, aún a sabiendas de que sean pequeñas metas parciales, que nos encaminen a la meta final. Ahorrar 100mil con 500 mensuales de entrada se me antoja utópico.
Lo que ocurre es que cuando vienen vacas flacas -qué malas son- y los gobiernos suben los impuestos de una forma desmedida y a los paganinis de siempre, les toca pagar con lo ahorrado a modo de hormiguita, cuando antaño las cigarras cantarinas no ahorradoras se paseaban por ahí como Willy Fog y te pasaban sus viajes, sus coches, sus lujos y sus vicios por las narices y ahora no tienen nada más que deudas y no pueden pagar ningún plato roto, pues a las hormigas se nos hacen las patitas huéspedes y en ocasiones de mala leche, nada relaxing por cierto, nos preguntamos si mereció la pena ahorrar tanto... o no...
También es cierto que muchos han ahorrado toda su larga vida, tacita a tacita, para que al final, cuando han acumulado un pequeño capital, llega un hijo de Satan y le estafa y en sus momentos de lucidez, derramando amargas lágrimas -que sus descendintes jamás olvidarán- se pregunta por qué, para qué, qué necesidad hubo de vivir con tantas limitaciones, esfuerzos y sacrificios.
No sé yo. Ha cambiado bastante mi mentalidad desde el 2009... También se ha modificado sustancialmente mi estado de salud, mi estado psicológico... Muchas cosas han cambiado en mi vida, muchas.
Lo que no significa que mi mentalidad hormiguera haya sufrido una metamorfosis absoluta y se haya convertido en el derroche hecho vaca, pero ni un extremo, ni otro.
Un abrazo que vive hoy, intenta olvidar los momentos desagradables del pasado y no tiene nada claro su futuro.
¡Sed felices!
Si un amigo es de verdad, su amistad perdura en el tiempo y con la distancia.