Los funcionarios catalanes sufrirán un recorte salarial adicional del 2%, (taza y media)
El presidente de la Generalitat, Artur Mas, ha confirmado hoy que los funcionarios catalanes y los trabajadores del sector público catalán tendrán un nuevo recorte en sus nóminas después de haber impuesto ya el mes pasado un recorte del 3% del sueldo que supone un ahorro de 180 millones de euros para las arcas públicas. El ajuste adicional será en torno al 2%, que probablemente se les descontará de la paga extra de Navidad. El otro 3% de recorte sobre el total de retribución anual se les descontará de la paga de junio, de forma que el descuento en la paga de verano será del 6%.
Mas ha asegurado que este nuevo recorte solo podrá modificarse en caso de que el Gobierno central decrete un recorte generalizado de las nóminas a los funcionarios del conjunto de España. “Estamos pendientes de si la medida se traslada al conjunto del Estado o no”, ha dicho durante una comparecencia conjunta con el presidente Canario, Paulino Rivero, de visita institucional a la Generalitat.
Para evitar otra oleada de protestas sindicales, el presidente de la Generalitat ha asegurado que el pasado 22 de noviembre, cuando presentó el segundo plan de ajuste del Gobierno catalán, ya habló de una rebaja de nóminas de los funcionarios de “en torno al 5%” y que, por lo tanto, este recorte adicional no puede considerarse “nuevo”. No solo los funcionarios de carrera verán de nuevo reducido su sueldo. Mas ha dejado claro que la medida afectará a los 230.000 trabajadores del sector público catalán. Esto es: la suma de los departamentos y la de las empresas públicas.
Los sindicatos han puesto el grito en el cielo y han tachado el nuevo recorte de "inadmisible". Desde CC OO, Guillem Sabaté, ha denunciado que "todos los ajustes recaigan sobre los empleados públicos". Sabaté se ha mostrado convencido de que Mas se ha decidido a anunciar el nuevo recorte después de que el pasado lunes el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, descartara aplicar ajustes salariales sobre los funcionarios. "Es de nuevo una medida impuesta sin negociación ninguna e injusta, porque los empleados públicos llevamos soportando recortes salariales desde 2006", ha dicho. Sabaté también ha resaltado el agravio de los empleados de la Generalitat respecto a los de la administración local o central. "Somos la víctima más fácil y estamos financiando la deuda de la Generalitat, lo cual demuestra el fracaso en la gestión del Gobierno de CiU", ha zanjado.
Por parte de CATAC, Lluís Blanco ha tachado el nuevo recorte de "previsible, porque el Gobierno aplica los recortes sobre los más débiles, mientras continua malgastando dinero por otros lados, demuestra que la ciudadanía no le interesa". Desde UGT, cuando esta mañana todavía no se conocía este nuevo recorte salarial, el secretario de acción sindical, Camil Ros, ya ha calificado de "agonizante" la situación en la función pública. Ros ha subrayado además que la Generalitat no actuará como las empresas que devolverán a sus empleados parte del recorte cuando la situación económica mejore: "Ni se molesta en negociar el retorno de los salarios", ha dicho.
El nuevo recorte salarial será especialmente duro para los 7.000 interinos que a partir de abril verán reducida su jornada y su sueldo en un 15%, una medida que forma parte del paquete incluido en la ley de acompañamiento de los presupuestos que justo este miércoles está previsto que apruebe el Parlament. Los sindicatos, ya desde antes del anuncio de hoy, tienen previsto manifestarse el miércoles ante la cámara catalana. En total, el paquete de recortes de la función pública persigue un ahorro para este año de 625 millones de euros e incluye un recorte sin precedentes en las pagas y beneficios sociales que a juicio de los sindicatos supone una "regresión de 30 años en derechos laborales y salariales". A todos estos recortes hay que sumar el hecho de que la Generalitat prescindió durante el año pasado de una media de cinco empleados al día.