Los expertos prevén una subida de la luz superior al 6% en enero
El pulso político entre los ministros de Industria, José Manuel Soria, y Hacienda, Cristóbal Montoro, tendrá un primer efecto lateral sobre los consumidores el próximo 1 de enero. La retirada a última hora de la ayuda presupuestaria de 3.600 millones comprometida con el sistema eléctrico derivará en un incremento de la factura de hogares y empresas del 0,7%, además de la que depare la subasta eléctrica de mañana
Esta cifra es resultado del aumento del 1,3% de los peajes o de la parte regulada del recibo que Industria anunciará en los próximos días, según confirman a este diario fuentes ministeriales. Soria se limitó a decir que "como mucho" los peajes se incrementarán un 2% en la revisión de enero.
Industria sube un 1,3% la parte regulada del recibo de la luz tras el desplante de Montoro
A esta cifra habrá que sumar otro previsible incremento derivado del término energético de la factura, que se fijará mañana en la subasta trimestral Cesur entre comercializadoras eléctricas. Algunos expertos prevén que la subida en esta parte sea superior al 6%, según las cifras que marcó al cierre de ayer el mercado de futuros eléctrico. No obstante, estas fuentes precisan que dada la "volatilidad" de precios en las últimas semanas este porcentaje todavía podría sufrir variaciones.
De una forma u otra, el consumidor tendrá que afrontar un nuevo tarifazo en enero, un nuevo dardo contra la competitividad de la economía nacional en plena salida de la recesión. El incremento de los peajes equivale al nuevo coste anual del sistema, próximo a los 300 millones de euros, resultado de amortizar durante los próximos 15 años el principal y los intereses de los 3.600 millones de déficit de tarifa previsto para este ejercicio.
Esta cantidad será financiada en principio por las eléctricas con aval del Estado, pero luego se irá repercutiendo año a año sobre la factura de los consumidores. De esta forma, el nuevo coste impedirá a Industria bajar los peajes en ese periodo ya que la nueva normativa prohíbe cualquier descenso hasta que el sistema absorba la actual deuda de 30.000 millones de euros. Sí es posible, no obstante, que el recibo se abarate algunos trimestres por el menor precio de la electricidad en el mercado.
La clave, en la subasta entre comercializadoras
La clave de la próxima subida de la luz se encuentra, sin embargo, en el resultado de la subasta entre comercializadoras de mañana. La puja se produce en un momento de calentamiento en el mercado mayorista de electricidad, cuyo precio ha aumentado un 70% sólo en el mes de diciembre. Industria ha encargado investigar a la Comisión Nacional de los Mercados y de la Competencia (CNMC) esta situación por el efecto que pudiera tener sobre el recibo.
El precio base en el mercado de futuros eléctrico se situó al cierre de ayer en 57 euros por megavatio/hora para el primer trimestre de 2014. Esta cifra es un indicativo de lo que costará la energía en ese periodo, y por ello es clave para los inversores que participan en la Cesur y que en la práctica se encargan de cubrir el desajuste de precios de los generadores de energía, principalmente eléctricas, en ese periodo. Si se compara con el resultado de la última subasta y se incluyen algunos ajustes técnicos, la subida podría superar el 6% antes mencionado.
El aumento de los peajes del 1,3% supone también la entrada en vigor oficiosa de la nueva Ley del Sector Eléctrico, que mañana dará por concluido su trámite parlamentario. A partir de este momento, la nueva normativa estipula que todo desvío del 2% entre los ingresos y costes del sistema se traducirá en una subida inmediata del recibo. Ejemplos:unos menores ingresos de los previstos por caída de la demanda, un incremento de costes no contemplado o, directamente, un nuevo incumplimiento de Hacienda en su compromiso de adquirir ciertas partidas del sistema como la mitad de los costes extrapeninsulares.
Soria remarcó en declaraciones a los medios de comunicación que la luz ha subido un 0,9% en 2013, aunque no precisó que esta cifra es resultado de un brusco aumento de la parte regulada del recibo en agosto -en el marco de la reforma eléctrica- compensado por la bajada del coste de la energía en el mercado mayorista de electricidad.