Ya. Eso es que muchos no sois conscientes de las graves dificultades económicas que implicaría una secesión con todas sus consecuencias. Os habéis creído la tontuna esa de las balanzas fiscales, y que la República Popular Catalana va a ser Jauja. Lo digo y lo repito: para la España mutilada habrá graves problemas, pero para el nuevo Estado serán mucho, mucho más profundos.
No obstante tenéis una ventaja: dada la absoluta incompetencia de casi toda la clase política española (incluida la catalana, pero eso ahora no viene al caso) las represalias no serán tan eficaces como sí sería en otras circunstancias.