Los españoles pobres y en riesgo de exclusión social alcanzan su máximo: 12.866.431 personas
Los españoles pobres y en riesgo de exclusión social alcanzan su máximo: 12.866.431 personas
La Unión Europea cuenta con su propio termómetro de la pobreza, el indicador AROPE, para poder medir el nivel de renta de las familias, pero también las posibilidades de consumo y el nivel de empleo de la población del continente. Este medidor detecta qué porcentaje de la población en un país está en situación de pobreza y en riesgo de exclusión social. La última vez que se tomó la temperatura en España, que fue en 2013, el termómetro AROPE marcó de nuevo cotas máximas de pobreza: del 27,3%, o lo que equivale a 12.866.431 españoles pobres y en riesgo de exclusión social. La tasa de pobreza por nivel de renta ha bajado, pero sube el número de trabajadores empobrecidos La Red Europea Contra la Pobreza (AEPN, en sus siglas en inglés) acaba de presentar este martes el último informe sobre España que revela un crecimiento de más de un millón de pobres entre los años 2009 y 2013 (1.320.216 exactamente), pero que dibuja un gráfico en el que parece que el crecimiento de la pobreza y la exclusión pueden estar llegando a su fin. En la red explican que desde 2011 se viene frenando el aumento de las tasas de pobreza —en el último año se incrementó en solo una décima— aunque aseguran que este freno al incremento de la pobreza no se debe a una mejora de las condiciones de vida, sino a un empobrecimiento general de la población. Renta, empleo y consumo han tenido en el último año comportamientos dispares. La tasa de pobreza, que mide la renta exclusivamente, se ha visto reducida en cuatro décimas (de 20,8 a 20,4), hasta niveles de 2009, al bajar el umbral de ingresos que define la pobreza hasta los 8.100 euros anuales. Mirando exclusivamente la renta en España habría 9.614.476 personas viviendo por debajo del umbral de la pobreza. Los expertos han comprobado que la reducción de la tasa de pobreza por la renta en 2013 no ha sido suficiente para reducir el porcentaje total de personas en riesgo de exclusión social, en buena parte debido a la mala calidad del empleo, la circunstancia que más está haciendo incrementar la pobreza en España, un factor que ha doblado su incidencia en los últimos cinco años hasta alcanzar al 15,7% de la población. Impago de recibos Uno de los indicadores que más ha empeorado durante la crisis es el porcentaje de españoles que no puede hacer frente a tiempo a sus recibos mensuales El informe destaca que en el año 2013 un 11,7% de trabajadores en España viven a pesar de tener un empleo en situación de pobreza. "Lo que viene a demostrar, una vez más, que no cualquier trabajo protege de la pobreza", indican en su informe. La calidad del empleo tiene relación directa con el tipo de jornada, con la evolución creciente del porcentaje de ocupados con jornada parcial que, para el último cuatrimestre de 2013, alcanzó al 16,1% . En cuanto al consumo, lo que el termómetro de Eurostat mide se denomina "privación material severa". Esto incluye la posibilidad que tienen los ciudadanos de afrontar la compra de bienes y servicios básicos, como alimentación, o el abono de los recibos del hogar, luz, gas o hipoteca. En este sentido, uno de los indicadores que más ha empeorado durante la crisis es el porcentaje de españoles que no puede hacer frente a tiempo a sus recibos mensuales. Si en el año 2007 eran el 6,6%, en 2013 eran ya el 11%. Esto supone que más de uno de cada diez españoles se retrasó en el pago de sus recibos de luz, gas, alquiler o hipoteca por carecer de medios para afrontar las facturas. Además, también es destacable el aumento del porcentaje de españoles que no son capaces de hacer frente a gastos "imprevistos", que ha pasado en cinco año del 30% al 42%, o el número de aquellos que dicen que no pueden ir ni una semana de vacaciones al año, ya casi la mitad de la población (48%). La red europea también recalca en su último informe que todavía 2,8 millones de españoles viven con menos de 339 euros al mes, en situación de "pobreza severa". Por Comunidades Autónomas, el informe destaca que esta población está desigualmente repartida. Mientras en Navarra son el 1,2% de los habitantes, en zonas como Castilla La Mancha alcanzan el 10,5% de la población.
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