Os hago un copy del Diario de Galicia sobre como resolvió la marina USA el último secuestro mediatico.
Ojito al dato, esto pasó en Abril de este año con San Obama de presidente (sip el mismo Obama al que despues de mandar matar a los terroristas le dieron el Nobel de la Paz)
Tres disparos, tres balas, tres secuestradores muertos
| Así actuó la Armada norteamericana para liberar a Richard Phillips
En el rescate del capitán estadounidense secuestrado por piratas somalíes hay cinco protagonistas. El primero es el capitán Richard Phillips, al que EE.?UU. considera un héroe porque se ofreció a los captores a cambio de su tripulación.
El segundo es Obama, comandante en jefe del Ejército, que dio la orden de liberar a Phillips. El viernes por la noche, el presidente recibió una llamada del Consejo de Seguridad en la que se le informaba de la situación. Obama concedió entonces a las fuerzas armadas la autoridad para «salvar la vida del capitán». El sábado la orden fue más allá y el presidente autorizó a fuerzas especiales a «participar en acciones de emergencia».
Los otros tres protagonistas son los francotiradores que acabaron con la vida de los piratas. Estos tres tiradores del cuerpo especial del ejército SEAL dispararon solo tres balas. Era por la noche y el mar estaba picado. Disparar en ese momento no era fácil y más difícil aún era acertar con el primer tiro. Fallar hubiera supuesto casi con seguridad la muerte del capitán.
Cuando el vicealmirante William Gortney, comandante de las fuerzas de EE.?UU. en la región, explicó ayer el operativo, dijo que los francotiradores están «muy entrenados».
Cuatro piratas retenían al capitán en un bote salvavidas desde el miércoles. Las conversaciones para liberarlo habían empezado el jueves. Los bandoleros pedían dos millones de dólares y amenazaban con matarlo si eran atacados.
El domingo, los piratas se habían quedado sin alimentos, agua y combustible. Pidieron a los negociadores que les llevaran provisiones. Un bote hizo varios viajes entre el Bainbridge , al mando de la operación, y el de los piratas. En uno de los viajes, uno de los piratas, de entre 16 y 20 años, pidió ayuda porque estaba herido. Había sufrido un corte en una mano cuando Phillips se había arrojado al agua para intentar huir. El joven fue llevado al Bainbridge .
Solo quedaban tres hombres con el capitán. Poco después del atardecer, los tres francotiradores, pertrechados con gafas de visión nocturna y a bordo del Bainbrigde , recibieron la orden de esperar el momento en el que los piratas estuvieran a tiro. Y mientras dos de los secuestradores estaban en la parte exterior del bote y el tercero, armado con un AK-47, apuntaba a la espalda del capitán tras un cristal, llegó el momento.
Fueron tres disparos, tres balas, tres piratas muertos