¿Generosidad desacertada o supuesta pretensión encubierta?
Recientemente he leído una noticia en la que se habla sobre los 320 millones de euros que la fundación Amancio Ortega "dona" al gobierno (al Ministerio de Sanidad).
http://www.expansion.com/empresas/2017/03/29/58db529ae2704ea75d8b4591.html
Pero en este caso el dinero no está destinado a ayudar a ONGs privadas o a contratar científicos y laboratorios para investigar sobre el cáncer. No.
Inicialmente debo decir que no se puede negar que cualquier acto de generosidad basado en la lucha contra el cáncer es loable y bien visto por todos. En España llegamos hasta el esperpento de celebrar eventos públicos en los que se humilla, se tortura salvajemente y finalmente se ejecuta de forma muy sangrienta a inocentes animales herbívoros por simple diversión (corridas de toros) en nombre de la lucha contra el cáncer.
Si partimos de la base de que el gobierno administra los impuestos de todos los españoles para suministrar y mantener las infraestructuras y los recursos públicos para todos los ciudadanos y que el gobierno es quien decide los presupuestos anuales destinados para los diferentes ministerios (y que por lo tanto, es quien debería dedicar más recursos para adquirir las máquinas y el material para la lucha contra el cáncer y menos recursos por ejemplo, para salvar entidades financieras o mantener a eurodiputados viviendo a cuerpo de rey)...
Entonces, independientemente de la noble naturaleza de la donación, ¿podría considerarse (supuestamente) este acto como una pretensión encubierta al gobierno? Porque la realidad es que todo el dinero que se ahorran de una cosa, pueden destinarlo a otra.
¿Con qué cara puede un gobierno, en un momento dado, multar o negar un contrato a una compañía que le está inyectando dinero en uno de sus ministerios?
Sabemos de la existencia de los "sobornados" corporativos (compañías, partidos políticos, instituciones...) que van mas allá del individuo o del pequeño grupo de personas.
Pero ... ¿podría darse la situación de pretensión a administraciones?
Es una duda existencial...
Saludos.