El deseado pacto económico
Hace varios meses que se viene hablando de la conveniencia de llegar a un pacto económico para salir de la crisis. Los ciudadanos estamos preocupados porque vemos que ningún partido aporta alternativas válidas y coherentes capaces de superar los obstáculos que nos lleven a la recuperación. Cada día aumenta el paro y las familias se empobrecen a pasos agigantados.
PP y PSOE se han enzarzado en una disputa que, al parecer, no llegará a ningún sitio. Ninguno de ellos está por la labor. El PSOE no solo porque ha demostrado --hasta ahora-- ser incapaz de dictar medidas eficaces que favorezcan la creación de empleo sino que, muy al contrario,su desorientación ha provocado ya el 20% de paro. El PP porque considera que es el gobierno el que debe tomar las riendas de la situación y solventarla por sus propios medios.Parece no estar dispuesto a ayudar al gobierno a superar esta situación. Hasta aquí, nada que objetar.
No falta en el PP quien, con buen criterio, propone la convocatoria de elecciones y que sean los ciudadanos quienes decidan qué partido deberá sacarnos del atolladero económico. Otros suponen que el PP no debería colaborar en las medidas porque el PSOE lo culparía de un probable fracaso.
Por otro lado, al mismo tiempo que se habla de un pacto entre ambos partidos, los ciudadanos observamos que el Parlamento es tan solo un foro de debate cuya única finalidad es echarse a la cara insultos e improperios, chanzas, frases irónicas y aplausos para aquél portavoz cuyo parlamento resulte más punzante para el contrario.Difícilmente podrán llegar ni siquiera a una mínima reunión de buenas intenciones si lo que prima entre ellos son los insultos y descalificaciones mutuas.
Es cierto que el gobierno debe gobernar, y ello implica tomar decisiones tanto si gustan como si no gustan. Si lo hace bien, la gente volverá a votarlos y si no, votarán a los otros. Pero hay que decidirse. Lo que no debe hacerse es actuar con interés electoral para permanecer en el puesto y en la foto, pues a todos nos da la impresión de que lo que quieren nuestros políticos es seguir estando lo más cerca posible de la tarta.
Además, yo entiendo que un pacto de interés nacional, no deberían comprometerse tan solo dos partidos por más representatividad que puedan tener. Hay muchos sectores interesados en salir de la crisis y seguramente todos tengan algo positivo que aportar.
Señores políticos, rómpanse la cabeza, piensen un poquito más y trabajen en serio si de verdad quieren retrotraer este país al puesto que ocupaba hace pocos meses; tomen nota de lo que ya han hecho otros políticos europeos y piensen que cada día que pasa hay más españoles que pasan hambre.