Todo lo que recibas en dinero en efectivo y que no haya constancia por ningún lado, es opaco para Hacienda y, por tanto, no se va a considerar de cara a ser ingresos o incremento patrimonial de cara al IMV.
Ahora bien, si tu nombre y datos personales figuran en un modelo 650 (impuesto sobre sucesiones y donaciones ante Hacienda), y el mismo pone el dinero percibido por dicha transmisión, da igual que lo recibas en efectivo, cheque, un ingreso bancario, joyas, lingotes de oro, diamantes, obras de arte, cabras o sellos de Pokémon, porque Hacienda ya sabe su valoración en euros y, por tanto, también la Seguridad Social.