Aún no habiendo leido la sentencia, sólo notas de prensa, voy a permitirme el lujo de hacer de abogado del diablo, perdón, del macho.
Tenemos a una señora, Licenciada en Derecho, que libremente ha decidido no ejercer su profesión.
¿Exíste algún acuerdo entre las partes por el que ella renuncia a su derecho al trabajo a cambio de realizar las tareas del hogar familiar?
¿Si no existe ese acuerdo, está la señora en condiciones de demostras que durante su prolongado matrimonio ha buscado trabajo afanosamenteo o simplemente no lo ha hecho porque no le salía del chichi?
En el primer caso sería justa la compensación. En el segundo cero.
Supongamos que estamos en el primer caso:
Sus señorías han determinado que una forma de estimar el importe de la compensación a recibir, sería en equivalente al salario de un empleado de hogar. Como el salario del empelado de hogar ronda generalmente el salario mínimo, podemos entender que la compensación podría ser correcta.
Ahora bien, si se utiliza como referencia a los empleados de hogar, habrá que tener en cuenta que la señora trabaja para su marido, para sí misma y para sus hijos, por tanto el marido sólo debería soportar el cincuenta por ciento de la carga de su coste. De lo contraría estaría recibiendo una compensación por atenderse a sí misma y a sus hijos al cincuenta por ciento que son parte de su obligación y por tanto no remunerable. Ya nos qudamos en trescientos euros.
Siguiendo la normativa reguladora de los empleados de hogar, la señora ha disfrutado de manutención y casa-habitación, privilegio que a los empleados de hogar internos se les reconoce, pero que se valora económicamente y se descuenta de su salario. No recuerdo el porcentaje de descuento que se aplica en estos casos, pero ya vamos bastante por debajo de los trescientos.
Si a las distingudas señorías que han parido este engendro se les aplicara su propia medicina, estoy seguro que se defenderían como gato panzarriba argumentando cosas como estas y algunas otras más.
MORALEJA: Amancébate al margen de cualquier ley o registro público o privado.
Si alguien puede poner algún enlace a la sentencia la leeré atentamente. Así podré seguir despotricando.