El piso se podría vender, pero el procedimiento sería complejo e incluso familiarmente agotador.
Me explico. La propiedad del piso, por lo que apuntas, es proindivisa entre los tres hermanos. En estos casos cualquier decisión se ha de tomar por consenso de todos los participes.
En el caso que uno de ellos no quiera vender, a los otros dos no les quedaría más remedio que instar la disolución del proindiviso acudiendo a los juzgados y solicitando la tasación y subasta del piso.
Esta solución es cara, requiere abogados y procuradores, compleja, requiere un procedimiento judicial, y, sobre todo, agotadora por lo que implica de enfrentamiento entre hermanos.
En estos casos siempre es aconsejable hablar y negociar. Puede que el hermano que no quiere vender tenga buenos motivos para ello, o a lo mejor es una cuestión sentimental (el piso de la madre) y puede solucionarse pasado un tiempo.
En cuanto al tema de las cuentas, si todavía no hay aceptación y otorgamiento de herencia, el banco le puede negar toda información a tu padre, ya que no están obligados a facilitársela. Lo que si puede hacer es comunicar al banco el fallecimiento de tu abuela, para que bloqueen las cuentas y si hay alguien que está utilizando unos poderes (que ya no son válidos) no pueda seguir haciéndolo.
De todas maneras, me reitero en una cosa: una herencia, si no se gestiona con prudencia, generosidad y sentido común puede ser una manzana de la discordia muy difícil de digerir. Si la relación entre los hermanos es buena lo más importante es que siga siéndolo, aunque esto implique tener que ceder.
Un saludo