Los fondos no pertenecen a las gestoras ni a los depositarios, sino a los partícipes. Aparte de que es complicado que quiebren, porque se dedican en exclusiva a gestionar fondos a cambio de una comisión, no realizan actividades como conceder préstamos o invertir por su cuenta que les puedan poner en riesgo.
Al ser deuda a corto plazo de entidades solventes y estar diversificadas, es complicado que pierdan cantidades importantes, incluso aunque tengan la mala suerte de que quiebre uno de sus deudores. En el caso de los fondtesoros, además, la gran mayoría es deuda pública respaldada por el Estado español, que no va a quebrar de la noche a la mañana.
Saludos