Apreciado USILLO.
Son el segundo producto tocado por la varita mágica del Banco de España, que cuando limitó los fondos primero atrajo la atención a los fondos garantizados y ahora de los de objetivo de rentabilidad. Pese al éxito comercial, siguen sin convencer a los analistas. De hecho, según Ricardo Sánchez-Seco... “De fondos sólo tienen la carcasa: no le gusta ni la gestión pasiva de los mismos, ni la falta de una garantía de capital, que si tiene un fondo garantizado. Tampoco convence que los vencimientos sean muy largos, ya que éstos se tienen que estirar mucho en el tiempo como para aportar una rentabilidad mínima después de comisiones. Estar cuatro años con el dinero cautivo para recibir, en el mejor de los casos, un 2% anual no tiene sentido".
Un abrazo.