Algo parecido, aunque ya digo que las medidas pueden ser varias.
El Tesoro norteamericano comenzó con sus medidas en 2009, un momento muy distinto al que nos encontramos ahora. Esas medidas de estímulo se centraron en dos puntos: compra de deuda (para otorgar liquidez al sistema) y compra de titulizaciones hipotecarias (para ayudar a sus entidades financieras que estaban muy asfixiadas por aquel entonces).
Aquí, Dragui ya compró deuda pública de países periféricos cuando estaban (estábamos) con el agua al cuello y el interés del bono a 10 años era altísimo y la prima de riesgo iba encarada a los 700 pb. Ahora mismo, el interés del bono a 10 años del Reino de España se encuentra a niveles de 2005 (muy bajo), por lo que no creo que se dediquen a comprar deuda ya que ahora mismo eso no es el mayor problema. ¿Podrá comprar titulacione hipotecarias para aliviar a los bancos para que fluya el crédito y con esto se reactive el consumo y suba la inflación? Ni idea, ya que aunque las entidades financieras europeas ya están algo saneadas debido a las millonarias ayudas de los gobiernos respectivos, aun les queda algo de "basura maquillada" en sus balances y el crédito fluye muy poco a poco. A la hora de bajar más los tipos de interés de referencia (ahora están al 0,25%) no hay mucho margen de maniobra y esa única medida creo que no afectaría demasiado a los mercados. Luego está la medida de imponer una tasa negativa para los bancos, lo que les obligaría a no depositar su "sobrante" en el BCE (les costaría dinero) y a dar más crédito.
Aquí el problema que veo es que con estas medidas de estímulo no convencionales, las bolsas se vuelven adictas a esa liquidez y cuando se retiran las medidas las bolsas caen a plomo. Así ha sucedido en los EEUU cada vez que se terminaban las medidas de estímulo y hasta que se anunciaban otras (se realizaron hasta tres tandas de medidas).
En fin, no soy un profesional de esto y poco puedo aportar. Necesitamos un "pofesional" para que nos puede dejar las cosas más claras. ¡Ay! Cuanto echo de menos ahora mismo a Helm y a Ratiosharpe...
Este es un escenario que me gusta (como inversor) pero que a la vez me estresa, ya que al final resulta que las bolsas no se mueven por los fundamentales sino por lo que un día pueda decir o no el presidente del Banco Central de turno... Y así no hay Dios que se aclare.