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Invertir en Taiwan y China

68 respuestas
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#65

Re: Invertir en Taiwan y China

Hola Sergio,
El problema de nuestro "aprendizaje sobre la marcha" es el precio al que pagamos las lecciones... porque no lo puedes saber de antemano, y sólo lo ves en la cartera de tus fondos!

Así que hay que tentarse la ropa y mirar y remirar, en vez de meterse a ciegas en aventuras tras la primera recomendación leída.

Saludos

#66

Re: Invertir en Taiwan y China

Buenas, Safillo. Interesante artículo: "Tras celebrarse el decimotercer pleno quinquenal del Congreso Chino ¿Qué podemos esperar de China después del 13-5 Plenum?" Autor imagen: Funds People Se acaba de celebrar el decimotercer pleno quinquenal del Congreso Chino, donde se abordado el plan económico para el período 2016-2020. Los detalles del 13-5 no serán revelados hasta el mes de marzo del año 2016, con posterioridad al año nuevo chino, que dará entrada al year of the monkey, según el calendario chino. Según dicho calendario zodíaco será un año de optimismo, nuevas aventuras y ambiciones. Aunque el gobierno no ha filtrado mucha información sobre los objetivos económicos de los próximos años, si ha dicho alto y claro que el objetivo principal será mejorar los ingresos y el nivel de vida de su población. A mayores ingresos y mejor nivel de vida, mayor consumo. Primer mensaje claro que nos dejan entrever. Uno de los objetivos principales que se marcó el gobierno en el pleno 12-5 del 2010 fue el de duplicar tanto el PIB como los ingresos medios de sus ciudadanos para el 2020. El gobierno oficialmente ha estimado que para conseguir dicho objetivo, la economía debe de crecer durante los próximos 5 años a un ritmo cercano al 6,5%. Dado que China sigue siendo una economía relativamente pobre, con una renta per cápita que no llega al 25% del nivel de la americana, un objetivo de crecimiento de esas características no parece descabellado. Llevamos cuatro años escuchando alarmas acerca del hard landing chino, incluso, hay economistas que siguen todavía vaticinando dicho evento. Por definición, un aterrizaje que tarda cuatro años en producirse, es tiempo más que suficiente para que lo consideremos un soft landing. Este aterrizaje suave no ha sido coyuntural, ha sido planeado y provocado por el gobierno mediante una transición ordenada de una economía cuyo crecimiento se basaba en el sector industrial y las exportaciones, a una economía basada en consumo y sector servicios. En el siguiente gráfico podemos observar cómo ha ido evolucionando dicha transición descomponiendo el crecimiento del PIB por el lado de la producción: Hay tres motivos estructurales que consideramos que podrían provocar crecimientos inferiores a los inicialmente previstos: - China está en proceso de abordar reformas medioambientales severas para mejorar la calidad del aire y el agua. Esto sin duda absorbe recursos e impide crecimiento en el corto plazo, siendo una magnífica noticia en el largo. - La brutal campaña anticorrupción iniciada por el presidente Xi en 2014, sin duda tiene como efecto colateral el retraso en la toma de decisiones y en la iniciación de nuevos proyectos por parte de los equipos gestores de las entidades públicas (SOE). El management está más preocupado en limpiar posibles escándalos y salvar su puesto de trabajo, que en abordar nuevos proyectos de inversión. De nuevo una gran noticia a largo plazo. - Probablemente la más importante se refiere a las consecuencias de una política de hijo único que ha durado 35 años. La población en edad de trabajar ha dejado de crecer y, aunque recientemente se ha subido la limitación a dos niños por unidad familiar (de nuevo una buena noticia), pasarán dos décadas hasta que dicho segmento de población vuelva a crecer. Para contrarrestar este efecto el gobierno seguirá impulsando el éxodo rural de cara a que trabajadores con empleos poco productivos (agrarios), se conviertan en empleados urbanos. Consumo en China A día de hoy el consumidor chino destina menos de un 40% de sus rentas netas al consumo, la mitad que en Estados Unidos y otros países desarrollados, como podemos observar en el siguiente gráfico:

#68

Re: Invertir en Taiwan y China

Otra buena recomendación para Asia en 2016., de Matthews Asia

"Los mercados asiáticos pintan muy bien de cara a 2016"
Creo que es justo decir que la confianza hacia China, y por extensión, hacia Asia, dentro de la comunidad de inversores de Estados Unidos, está bastante polarizada. Mientras algunos ven oportunidades en la debilidad vista en la segunda mitad del año, las dudas sobre la realidad de las recientes cifras de crecimiento y la ansiedad sobre la ralentización de la economía china ha provocado a otros inversores un gran temor por el papel de China como factor determinante de la deflación en la economía mundial. Creo que esta cautela se refleja en los inversores de todo el mundo, aunque que el grado de malestar con China y Asia es quizás menos agudo en Europa. Mientras que los inversores de Asia parecen ser mucho más optimistas sobre sus propias perspectivas de crecimiento a largo plazo, en general los inversores están todavía en modo cauto de "esperar a ver qué sucede".

No es difícil ver por qué. De hecho, sólo vamos a enumerar los vientos en contra a los que se enfrenta Asia a corto plazo: la perspectiva de un mayor ajuste de Estados Unidos de su política monetaria; la desaceleración del crecimiento nominal; los bajos márgenes y el decepcionante crecimiento de los beneficios; la fortaleza del dólar y la debilidad de las monedas locales; el aumento de los diferenciales de crédito y el pobre impulso en los mercados de renta variable. Y todo esto sucede en un momento en que las valoraciones, aunque no son caras, no pueden considerarse como baratas en términos absolutos. Es comprensible esperar algún evento o alguna mejora antes de cambiar volverse más positivo. Y es racional asumir que las tendencias actuales van a persistir mientras los inversores tratan de predecir el futuro a corto plazo.

Ahora, déjenme sugerir que contamos con algunos datos que deberían permitirnos tener más confianza sobre la capacidad de Asia para capear las fuerzas deflacionistas mundiales. En primer lugar, las cuentas corrientes en Asia son en general positivas. Eso significa que los países asiáticos están ahorrando más a nivel nacional de lo que invierten en el país. De esta forma, son relativamente menos dependientes del capital extranjero. Hay algunas excepcionescomo la India o Indonesia.Peroincluso en estos casos, la dependencia de los mercados de capitales en dólares se ha reducido drásticamente en los últimos años. En segundo lugar, las tasas de inflación son bajas en gran parte de la región (de nuevo Indonesia y la India son excepciones) y esto significa que los políticos de Asia tienen mucho margen para compensar los impulsos deflacionistas, ya sea a través de la política monetaria, del gasto público o de recorte en los impuestos. La vuelta a un contexto de mayor inflación aliviaría un poco la presión sobre los márgenes, los beneficios y las valoraciones.

La pregunta es: ¿Estamos viendo señales de alguna respuesta de este tipo por parte de los gobiernos? Creo que si. La primera es la repuesta natural de los mercados: el ajuste de precios. Ante las presiones deflacionistas de Estados Unidos, la más obvia es que las divisas de Asia se han tensionado. Hemos asistido a descensos agudos se han circunscrito a las divisas ligadas a la evolución de los precios de las materias primas como el ringgit de Malasia y la rupia indonesia. En otros países, la moderada caída de las divisas (ni mucho menos tan graves como las vistas en América Latina) ha actuado como una especie de válvula de presión para proteger el empleo doméstico y mantener la demanda interna. Aunque se trata de un lastre para las rentabilidades de los activos denominados en dólares estadounidenses y (en menor medida) en euros, el hecho de que las monedas hayan sido capaces de actuar como estabilizadores de la demanda muestra el gran progreso realizado por Asia desde finales de los 90.

En segundo lugar, tenemos la respuesta activa de los responsables políticos. En la India, el banco central a conseguido con éxito reducir las tasas de inflación subyacente sin que esto tenga un impacto demasiado severo en los beneficios. En China, estamos viendo cómo las autoridades siguen con sus reformas del sistema financiero, y apoyan el mercado inmobiliario. Por su parte, Japón continúa también con su reformas estructurales. Así que frente a la deflación estadounidense, los tres gigantes de Asia parecen estar respaldando medidas en la otra dirección. El grado de equilibrio es quizás aún pequeño. Pero tras hablar con clientes e inversores en la región creo que no hay una gran crisis de liquidez. De hecho, si la aguda reacción aguda bajista a la devaluación del renminbi chino a mediados de 2015 nos ha enseñado algo, es que, a raíz de la caída de las bolsas, las valoraciones emergieron rápido y los compradores se apresuraron a entrar en los mercados.

Gasto de la clase media

En este contexto, las perspectivas de crecimiento a largo plazo de Asia todavía tienen buena pinta. Las altas tasas de ahorro, la gran base de fábricas, las reformas de los gobiernos en el plano financiero, legal y corporativo significa que Asia debería seguir invirtiendo y creciendo a tasas más altas que el resto del mundo. Con el tiempo, esta inversión continuará aumentando los salarios reales en toda la región. Esta tendencia no sólo apoyará las divisas y el crecimiento, sino que también puede dar lugar a grandes cambios en los hogares de Asia. La región representará dos tercios del gasto global de la clase media en 2050. Creemos que este es sólo el comienzo de un crecimiento sostenido que ayudará a generar beneficios a quienes faciliten este revolucionario cambio en el estilo de vida: las marcas de consumo, los restaurantes, el ocio, los medios de comunicación, los seguros, el sector inmobiliario, la banca de consumo y la gestión de patrimonios. En la industria, los equipos de automatización y el software ayudarán a las empresas compensar los salarios más altos. El aumento del gato público y privado en salud, en el medio ambiente, y el bienestar general abrirán nuevas oportunidades para las empresas que creen ventajas competitivas y aumenten las ganancias y la rentabilidad para los accionistas.

A la luz de estas tendencias, debemos recordar el entorno monetario que domina nuestra visión y los titulares de los medios: ¿Cuándo volverá la Fed a subir los tipos de interés y en qué cantidad? Aunque es importante a corto plazo, en el actual entorno esto sólo distrae nuestra atención de los verdaderos cambios económicos que están pasando casi desapercibidos ante nuestros ojos. Dicho esto, sin embargo, tenemos que admitir que es probable que 2016 sea un año histórico en Estados Unidos tras la subida de tipos de interés llevada a cabo por la Reserva Federal en diciembre.

Dentro de Asia, nuestro objetivo sigue siendo las empresas que respaldarán las tendencias de crecimiento en la economía real, en todos los países. Sin embargo, es cierto que algunos países parecen actualmente más fértiles al análisis corporativo que otros. En lo que respecta a las valoraciones, la India parece bastante cara, con un crecimiento de los beneficios decepcionantes y un montón de expectativas no cumplidas sobre las reformas del primer ministro. En China, las valoraciones son mucho más razonable, incluso partes del mercado de Hong Kong parecen baratas. Y tras un difícil 2015, la ASEAN ofrece nuevas oportunidades. Japón, al menos, ofrece un valor y una cierta esperanza de mejores rendimientos empresariales, aunque hay que tener cuidado con exagerar demasiado los efectos que puede tener la tercera flecha de Abe.

En general, espero con ganas el 2016. A pesar de que los vientos en contra son considerables, las empresas asiáticas parecen estar capeando el temporal, y mientras mantengamos nuestra visión en el largo plazo, el ambiente de inversión debería ofrecer algunas buenas oportunidades.

Robert J. Horrocks es CIO y portfolio manager de Matthews Asia.
http://www.fundssociety.com/es/opinion/matthews-asia-los-mercados-asiaticos-pintan-muy-bien-de-cara-a-2016

Saludos con lujo asiático navideño.

#69

Re: Invertir en Taiwan y China

Muy buenas,

Os dejo unas perspectivas por parte de Schroders respecto a este tema y dejando unas previsiones para 2016.

En 2015, las inquietudes en cuanto al crecimiento y a las políticas monetarias en China han sido los principales obstáculos para el universo emergente, por lo que algún indicio de mejora en este sentido debería resultar positivo para 2016. Seguimos pensando que la probabilidad de que se produzca un aterrizaje forzoso en China es exagerada. Está claro que el antiguo modelo económico del país, con un crecimiento basado en el sector secundario, está sufriendo tensiones y la reticencia por parte de las autoridades a reestructurar algunos sectores —ante las presiones sociales y políticas— ha hecho que los avances en materia de reformas decepcionen. Sin embargo, esto es sólo una parte del panorama general. El nuevo modelo económico chino, más orientado al consumo y a la tecnología, se está beneficiando de un sólido crecimiento estructural y está claro que la economía está dejando de depender de la inversión para impulsar el crecimiento. De hecho, el crecimiento del consumo parece bien orientado para desbancar al de la inversión en 2015 por primera vez en más de una década. También deberá vigilarse muy de cerca si el mercado inmobiliario sigue repuntando en 2016, dado que este sector tiene un efecto más directo en la riqueza y el consumo que la actividad industrial. 
 
Y lo que es más importante, las autoridades Chinas cuentan con las herramientas necesarias para sostener la economía de ser necesario. De hecho, éstas han implantado recientemente medidas de estímulo tanto monetario como presupuestario y es probable que vuelvan a hacerlo. Aunque prevemos que el crecimiento prosiga su desaceleración a largo plazo hasta niveles más sostenibles, la implantación de una política monetaria expansiva debería contribuir a estabilizar esta variable en 2016.
Así, aunque es poco probable que desaparezcan los temores acerca de un aterrizaje forzoso del país, esperamos que éstos se apacigüen a lo largo de 2016, lo que debería ser positivo para el universo emergente.

Saludos