Como anexo a esto que cuenta Moclano.
Si las expectativas de inflación ya están descontadas, la clave está en la inflación de equilibrio. La inflación de equilibrio es la diferencia entre el rendimiento nominal de una inversión a tipo fijo y el rendimiento real (margen fijo) de una inversión vinculada a la inflación de vencimiento y calidad crediticia similares.
a) Si se posee el bono:
Si la inflación real es mayor que la de equilibrio, el bono vinculado a la inflación superará en rendimiento al de tipo fijo. Por el contrario, si la inflación real está por debajo del umbral de rentabilidad, el bono a tipo fijo superará al vinculado a la inflación.
b) Si se posee un fondo de bonos:
El precio corresponde al valor liquidativo diario en el mercado secundario de bonos, que depende del valor de los tipos de interés que descuenta el mercado. Si ha habido expectativas de inflación y eso ya está descontado en los precios invertir en un fondo de bonos ligados a la inflación tiene tanto riesgo de subida de tipos como uno de tipo fijo. Si la inflación real resulta que está por debajo de la de equilibrio esperada el resultado es que se hace un estropicio no pequeño.
En definitiva, que los fondos de bonos ligados a la inflación es como todo en inversión: hay que comprarlos cuando nadie los quiere, cuando no hay expectativas de inflación alguna. De esa forma, cuando empieza a haberlas se recogen todos los beneficios. Comprar bonos ligados a la inflación cuando la inflación ya está aquí es como el que compra RV cuando la bolsa está en máximos: lo razonable es que tenga que hacerse el cuerpo a soportar alguna que otra caída gorda.
Recordemos la Biblia Ervigensis.
Génesis inversor, capítulo 54, versículos 1 y 2:
Así habla el oráculo: Dos mandamientos os doy. El primero es que no perderás tu dinero. El segundo que no olvidarás el primero
Carta a los rankianos, capítulo 3, versículos 13 y 14 :
No comprarás rendimientos pasados ni nada que no entiendas porque luego vendrán el llanto y el crujir de dientes
Apocalipsis financiero, capítulo 5, versículos 34 al 36:
...en ello estaba cuando tuvo una visión, en la que bajaba al averno donde el diablo vendía bonos a los incautos que se apartaron de la palabra, solo para ver como su precio bajaba sin entender cómo ocurría. Y era grande su sufrimiento y no tenían consuelo