Fátima Taleb de Ganamos Badalona En Común, es la nueva concejala musulmana, para integrar a los inmigrantes en la ciudad anegada y maltratada. Sale el podrido Albiol, entra la pura Taleb. Justicia poética. Querer limpiar Badalona y que tus estrategias de división y menosprecio se te vuelvan en forma de pacto boomerang de la oposición. Querer inocular el veneno por toda el área metropolitana y fracasar estrepitosamente. Por suerte, el 24-M, Dios y Alá se confabularon y eliminaron a los podridos .A Taleb, no paran de llegarle mensajes de apoyo: "Eres valiente, estamos contigo". Más WhatsApp que votos de su gente. Una barbaridad que hagan falta quince años para poder votar. Que les impidan con vallas de desinformación y burocracia. Según SOS Racismo y la Plataforma ciudadanos como tú, de los más de tres millones de personas extranjeras empadronadas, sólo un 19% cumplían los requisitos para inscribirse en el censo electoral. Sólo 22.714 personas de países no comunitarios con acuerdo de reciprocidad han podido votar, el 1% de las personas extranjeras extracomunitarias que viven en nuestras ciudades. Seguro que, en Badalona , dentro de cuatro años, votará mucha más gente nacida fuera, que nacida en la ciudad. Por eso Taleb es peligrosa para los fachas: su sonrisa franca abre, por fin, la puerta de la visibilidad en una Catalunya mestiza, que lucha por la independencia.A Taleb, le dicen que meta caña a Albiol, pero ella no quiere una guerra, quiere ser la concejala de todos, también la de los fachas que arrancaban su cara con el velo musulman, de los carteles electorales. Por el bien del país entero, necesitan cuidados intensivos en Badalona, detener la infección, deshacer los bandos guerracivilistas que ha generado el charlatán tóxico que envenena con odio los barrios empobrecidos y marcha a dormir a Pedralbes, el barrio rico de Barcelona. Ante la política embrutecedora practicada hasta ahora, el nuevo gobierno diverso contiene la sabiduría de los quince años de trabajo de mediación y calle de Taleb. Como una nueva Rosa Parks se sentará en los asientos reservados a los blancos. Ramon Riera, del Partido Podrido (PP), la quiso alterar recriminándole que su juramento no se adaptaba a la norma. Ella dice que, contra los insultos, levanta bien alto la cabeza. Juró su cargo "por imperativo legal" y "por un proceso constituyente hacia una República Catalana libre, soberana, justa socialmente, llena de paz, amor y convivencia". Inshallah.